El grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Alicante quiere que el pleno municipal se pronuncie este jueves sobre el posible aumento de la contrata de la limpieza, que ahora cuesta 36 millones de euros a las arcas municipales. Una propuesta que surgió a principios de este año del alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, y que ahora cuenta con el apoyo de Compromís y la oposición rotunda de Guanyar, la formación que tiene delegadas las competencias municipales de Limpieza a través del vicealcalde, Miguel Ángel Pavón, quien está al frente del departamento desde que hace dos semanas una reordenación interna de Guanyar relegara del cargo al anterior responsable, Víctor Domínguez.

La formación naranja registró ayer, por la vía de urgencia, una declaración institucional para que el pleno de Alicante se posicione sobre una propuesta que, a priori, cuenta con el visto bueno también de los trabajadores de una contrata que está en manos de UTE Alicante, participada por FCC, Ferrovial y Enrique Ortiz.

Fuentes del grupo de Ciudadanos aseguran que el texto que se ha elevado al pleno previsto para este jueves, y que se tratará siempre que supere la votación referida al trámite de urgencia, reclama que los cinco grupos y los dos concejales tránsfugas se pronuncien acerca de la ampliación de la contrata actual «en tanto que no existan criterios técnicos objetivos», en una alusión directa a la auditoría, cuyos resultados se prevén conocer a finales de este año.

En concreto, la declaración exige «el cumplimiento del pliego de prescripciones técnicas en todos sus puntos así como una auditoría del servicio y que exista una evaluación diaria y real del servicio prestado», y además pide que el pleno del Ayuntamiento de Alicante «manifieste la voluntad de no pagar más a la empresa de Limpieza UTE Alicante, salvo que se presentaran informes técnicos que avalen dicho aumento».

Por otro lado, Ciudadanos también solicitó la pasada semana la comparecencia en el pleno de este jueves del nuevo concejal de Limpieza, Miguel Ángel Pavón, para que detalle «los planes inmediatos que tiene con el fin de fiscalizar a la empresa adjudicataria». Desde Ciudadanos sostienen que «no se está cumpliendo el pliego de condiciones». Así lo expresó la portavoz municipal de Ciudadanos, Yaneth Giraldo, para quien «es preciso examinarlo todo, desde el incumplimiento de los niveles de absentismo a los que se comprometió la UTE en el pliego, la falta de personal, o la obsolescencia de los medios técnicos».

La formación naranja mantiene que «la idea del alcalde Gabriel Echávarri, apoyado en este caso por Compromís, de pagar más a la contrata para mejorar el servicio es cuando menos una frivolidad, por no decir una tomadura de pelo», según subrayó la edil la pasada semana, quien a su vez también pretende conocer si el nuevo responsable de la Limpieza [Pavón], «va a reforzar los servicios municipales de inspección, así como las sanciones a la UTE, que hasta ahora han sido -a su juicio- más que nada simbólicas».