El Ayuntamiento de Alicante tiene aún pendiente de valoración una bolsa de 915 personas solicitantes de ayudas a la dependencia, pese a que en el último año ha acelerado la tramitación de peticiones, justo desde que la Generalitat decidió derivar las valoraciones a los ayuntamientos.

La edil de Acción Social, Julia Angulo, recuerda que Alicante asumió en septiembre de 2016 una lista de espera de más de 1.500 dependientes que ha logrado reducir casi a la mitad al realizar los equipos de base y los especialistas del departamento 670 valoraciones en doce meses. En este sentido, dijo que con el PP no se superaban las 150 valoraciones anuales y que recibieron casos de 2011. Ahora se trabaja ya, afirma, con peticiones de 2015 y 2016. Una vez emitidos los informes de valoración de los solicitantes, sigue siendo el Consell el que resuelve las peticiones de ayudas económicas, residencias o servicios.

El mayor ritmo de valoraciones es posible porque a finales de 2016 se pudo empezar a destinar trabajadores con dedicación exclusiva a este fin. «El atasco era tremendo», explicó la jefa del programa de Mayores, Dependencia y Diversidad Funcional de la Concejalía de Acción Social, Adelina Navarro. Aun así quedan 915 casos por valorar «y cada día entran otros nuevos». La técnico agradeció al Consell la inversión que permitió al Ayuntamiento formar al personal en valoraciones de dependencia. Ahora hay ocho especialistas y 21 trabajadores en total en los equipos de base.

Angulo destacó el incremento en la cuantía que el Ayuntamiento ha destinado este año a programas de ayudas de emergencia, que ha pasado de 1,5 millones de euros a 2,2 millones, un 51 por ciento más, que quieren mantener en 2018. Las responsables de diversos programas hicieron balance de las actuaciones con menores de familias vulnerables en Navidad, Semana Santa y verano; la intervención comunitaria en Colonia Requena y con niños residentes en el barrio del Cementerio; y distintos proyectos en Carolinas Bajas, para mayores de 65 años, y voluntarios jóvenes.