El Hospital Universitario de Sant Joan, dependiente de la Conselleria de Sanidad, ha celebrado una jornada de educación sanitaria para pacientes anticoagulados, organizada por la Asociación Valenciana de Pacientes Anticoagulados y Portadores de Válvulas Cardíacas (AVAC) en colaboración con el jefe del Servicio de Cardiología, Vicente Bertomeu.

El subdirector general de planificación y organización asistencial, Carlos Fluixá, ha inaugurado la jornada, acompañado por la gerente del Departamento de Salud de Sant Joan d'Alacant, Beatriz Massa, y el presidente de AVAC, Luciano Arochena.

Los pacientes anticoagulados son aquellos que tienen riesgo o han sufrido ya una embolia o una trombosis y necesitan un tratamiento para prevenir nuevos episodios, tratamiento que, a su vez, supone el riesgo de sangrado. Ambos riesgos se pueden estimar de acuerdo a escalas que tienen en cuenta factores como la edad, el sexo, la diabetes o antecedentes de embolia, entre otros.

En esta jornada formativa, que ha reunido a expertos y pacientes, se ha pretendido transmitir la importancia de la educación sanitaria para lograr pacientes expertos, capaces de participar en la gestión de su propia salud. Estas ideas entroncan con una de las líneas estratégicas comprendidas en el IV Plan de Salud de la Conselleria de Sanidad, que se refiere al acercamiento a la ciudadanía, buscando la participación y el empoderamiento de la población.

En este sentido, si el paciente dispone de información acerca de su patología y del tratamiento anticoagulante, "podemos conseguir una correcta adherencia al mismo y mejorar el control de la enfermedad", ha destacado el doctor Bertomeu.

De este modo, el cardiólogo José Moreno ha explicado qué es la fibrilación auricular y el riesgo trombótico que conlleva; la hematóloga Paola Beneit ha hablado sobre las ventajas y limitaciones del autocontrol; el doctor Domingo Orozco ha expuesto las pautas que debe conocer el paciente acerca del tratamiento con anticoagulantes orales y el jefe del Servicio de Cardiología, Vicente Bertomeu, se ha centrado en cómo debe ser la selección del tratamiento anticoagulante en cada paciente.

A este respecto, el doctor Bertomeu ha explicado que, junto a los medicamentos tradicionales (indicados, por ejemplo, en pacientes con prótesis cardíacas), conviven desde hace pocos años los nuevos anticoagulantes, que presentan poca interacción con otros medicamentos o alimentos y no requieren un control tan periódico de los pacientes.

Como ha subrayado el jefe de Cardiología de Sant Joan, tanto médicos como pacientes "han de conocer las indicaciones de cada uno de estos fármacos anticoagulantes, con sus ventajas y limitaciones", para seleccionar el fármaco más indicado, según la situación clínica del paciente. Este hecho es de "vital importancia" para evitar las consecuencias de un mal control anticoagulante, que "serían el ictus o el sangrado", ha señalado.

Cada seis minutos se produce un ictus en España. Aproximadamente 100.000 pacientes presentan un accidente cerebrovascular en nuestro país cada año. El 20% de ellos viven menos de seis meses; el 30% presentan grandes secuelas; el 25% secuelas moderadas y un cuarto de los pacientes que sufren un ictus permanecen asintomáticos. Además, es la primera causa de invalidez en hombres y mujeres, así como la primera causa de mortalidad en mujeres y la segunda en hombres.

La Asociación Valenciana de Pacientes Anticoagulados y Portadores de Válvulas Cardíacas (AVAC) es una entidad sin fines lucrativos que se constituyó legalmente en el año 1985, por lo que lleva más de 25 años trabajando y realizando una importante labor social en favor de este colectivo y sus familiares, contribuyendo a la mejora de la calidad de vida de las personas que viven anticoaguladas en la Comunitat Valenciana.