El fuerte viento que sopló a primera hora de la mañana de ayer en Alicante, con rachas de hasta 44 km/h, obligó a los bomberos de la ciudad a realizar una veintena de actuaciones. Entre ellas, destacó la caída de cascotes en la fachada del Ayuntamiento, que supuso el acordonamiento de una zona que será revisada hoy por técnicos. Además, los bomberos llevaron otras actuaciones por idéntico motivo en las calles catedrático Abelardo Rigual, Alemania y Castaños. También hubo que retirar árboles caídos, ramas, toldos, placas de uralita, postes eléctricos y antenas en varios puntos de la ciudad.