Por quinto día consecutivo, las calles de la ciudad de Alicante han amanecido llenas de basura, sufriendo las consecuencias de unos paros parciales en el servicio de limpieza y recogida de basura que finalizaron, por el momento, durante la jornada del pasado lunes. Sin embargo, son muchos los puntos de la ciudad que siguen repletos de bolsas de basura. Entre ellos, el Casco Antiguo, uno de las zonas más frecuentadas por los turistas, la zona de playas, sobre todo en el entorno del Golf y de la Albufereta, junto a barrios próximos al centro comercial como Alipark. en calles como Princesa Mercedes, Renato Bardín o Deportista Perez Jordá.

Esta mañana, la concesionaria, UTE Alicante, y el comité de empresa han vuelto a escenificar sus discrepancias dentro del conflicto laboral que ha provocado unos paros parciales que, a priori, volverán a partir de la noche del próximo viernes. Tras la reunión ante el Tribunal de Arbitraje de Trabajo, la situación no ha cambiado y la huelga sigue en pie.

Al salir de encuentro y en declaraciones a Europa Press, el presidente del comité de empresa, Antonio Martínez, ha acusado a la concesionaria del servicio de limpieza de acudir a la mediación laboral con una actitud "más negativa" y ha lamentado que se mantiene la situación "sin acuerdo y en las mismas condiciones". "Esta empresa lo que está provocando, empujando a los trabajadores a la calle, es que les traigamos dinero del Ayuntamiento. Molestemos a la ciudad, y que alguien abra la mano y les dé dinero, que es lo único que quieren. No le importa nada Alicante o los trabajadores. Nada más les interesa hacer caja", ha agregado el representante sindical.

Tras la infructuosa reunión de hoy, el alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, tiene previsto reunirse mañana jueves con los representantes de la plantilla para intentar mediar en el conflicto con la empresa que responde a la negociación del convenio colectivo. Por ahora, el comité ofrece una subida salarial relativa a 2016 del 1,2% (la primera oferta fue del 0,25%) vinculada a la antigüedad, mientras que los trabajadores exigen un 1,2% pero sin condiciones, aunque al principio pedían un 1,6%, además de la renovación de los vehículos. La plantilla también reclama que se anulen las sanciones de empleo y sueldo impuestas por la empresa a ocho empleados por la huelga de celo, que arrancó a principios de agosto.

Por otro lado, el presidente del comité de empresa ha emplazado al vicealcalde y portavoz de Guanyar Miguel Ángel Pavón, a asistir a la reunión que mantendrán con el alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, para que "explique" por qué no está de acuerdo "con solucionar el problema" y por qué considera que "con él no va". El representante sindical responde así a la negativa de Guanyar a aceptar un incremento del coste del servicio de limpieza para tratar de mejorar la imagen de al ciudad, una propuesta del alcalde Echávarri que ahora respalda también Compromís, ambos socios de gobierno de Guanyar en el tripartito de Alicante.