«Hay cursos serios, con módulos de playa, piscina y primeros auxilios, donde se hacen prácticas simuladas. Luego hay cursos que se imparten por internet y que a algunas empresas les basta para contratar a jóvenes para que vigilen las piscinas y playas». Ésta es la diferencia en la preparación de los socorristas en la provincia de la que alertan desde Cruz Roja, una de las entidades formadoras a nivel nacional, donde también destaca la Federación Española de Salvamento y Socorrismo.
Ante esta situación, desde Cruz Roja reclaman que las administraciones, ya sea a nivel autonómico o nacional, «controlen» la preparación de los socorristas para «poner en valor» una profesión de la que puede depender la vida de muchas personas. «Hace falta que se unifiquen los criterios, que todos los cursos tengan un grado de seriedad. Y luego están algunas administraciones, que adjudican las contratas a las ofertas más baratas lo que, normalmente, acaba afectando al servicio, por ejemplo, con socorristas que sólo libran un día a la semana», explica Hernández Olivas, un mensaje que comparten también desde la Federación Española de Salvamento y Socorrismo, donde también apuntan hacia las administraciones. En este caso, se centran en la necesidad de un plan nacional para «concienciar» sobre el peligro de piscinas y playas. «Se habla mucho de los accidentes de tráfico y muy poco de los muertos en el agua. Habría que educar en este sentido», agregan.
