La Playa de San Juan está hasta los topes este verano, con más de 300.000 habitantes, entre turistas y alicantinos que dejan la ciudad para pasar sus vacaciones junto al mar. La población habitual se multiplica por diez en verano, con colas para cruzar los pasos de cebra, para quitarse la arena en los lavapiés y una gran demanda hostelera. Este tipo de negocios está experimentando un importante auge, con la apertura de una quincena de nuevos establecimientos, sobre todo de restauración y ocio, pero también comercio, en primera y segunda línea de la Playa de San Juan. Así lo corroboran las licencias de apertura solicitadas a la Concejalía de Urbanismo. Y los lugares favoritos son las avenidas de Niza y Costa Blanca.
Este bullicio es muy bien acogido por vecinos y comerciantes de la zona, que aún quieren más. De hecho, han elaborado un dossier dirigido al Ayuntamiento de Alicante en el que reclaman medidas para paliar los dos grandes problemas que sufre la población flotante y que consideran que, de solucionarse, atraería aún más turismo, más negocio y posicionaría a la playa de San Juan como una de las mejores de España: el aparcamiento y el transporte.
En el dossier, la asociación de vecinos Juntos Avanzamos, con el apoyo de hosteleros y comerciantes, propone al Ayuntamiento que los solares que hay repartidos por la zona y que tantas quejas despiertan por falta de limpieza e incluso por insalubridad sean destinados a espacios de estacionamiento. Este año se han ordenado los aparcamientos del paseo, donde el pasado verano los coches se subían a las zonas ajardinadas destrozando tanto el espacio verde como el riego.
«Faltan zonas de aparcamiento para que la gente pueda venir con su coche. Hay familias que dan tantas vueltas que ya no regresan», se lamenta el presidente vecinal, José Caracena.
La otra gran reivindicación es el transporte público, como alternativa al vehículo particular. «Lo ideal es que haya autobuses y tranvía las 24 horas del día todo el verano. Sobre todo por la noche, visitantes que están en Alicante dejarían el coche aparcado y vendrían más al no tener que conducir. Ahora sólo se refuerza el transporte los viernes y los sábados. Vivimos del turismo, no hay que olvidarlo. Eso sí, queremos un turismo ordenado, que no genere molestias a los residentes». En verano, según estudios de Aguas de Alicante, casi el 90% de la población vacacional se concentra en la Playa de San Juan (y Albufereta), donde este año abundan los apartamentos turísticos, algo de lo que alerta la Asociación Provincial de Hoteles, al entender que un importante porcentaje de ellos son ilegales. En estos puntos se dispara el consumo hasta los 800.000 metros cúbicos de agua frente a los 500.000 de media en invierno.
Los representantes vecinales de la Playa de San Juan también quieren que se refuerce la actual oferta de ocio, más enfocada para los jóvenes, y que se recuperen conciertos de estrellas de la canción como los que se celebraban en los años 80 en un escenario en la propia playa, que a su habitual imagen de sombrillas y lavapiés suma las casetas vestidor de colores instaladas por la Agencia Valenciana de Turismo. Las casetas son de madera, pintadas con colores vivos y el tejado a dos aguas típico de esta infraestructura. En su interior los usuarios disponen de un banco para sentarse y de perchas. El objetivo es dotar a las playas de elementos diferenciadores sobre el resto de playas del Mediterráneo.
En general, la zona de playas de Alicante multiplica su población en verano con casi los mismos servicios. Se refuerzan el transporte y los contenedores de basura, este año con recogida puerta a puerta en la zona de restaurantes de la avenida de Niza, pero en los días de más afluencia es insuficiente.
