Miguel Portero lleva 37 años de pescadero en el Mercado Central, profesión que heredó de su padre. Ahora es su hija Alexia, de 13 años, la que aprende a despachar gambas y boquerones pero Portero prefiere que estudie una carrera y se dedique a otra cosa porque «ésta es una profesión muy dura y sacrificada».

¿Es agosto un buen mes para la venta de pescado?

Sí, desde luego no es malo porque hay mucha gente pero es verdad que antes se notaba que el verano era más largo y ahora la gente lo reduce. Algo más siempre se mueve en agosto, pero también es verdad que muchas veces se ve el mercado lleno y al final parece que le hacen muchas fotos al puesto cuando vienen los tours de turistas pero comprar, comprar....

¿Suben los precios al subir la demanda?

Depende del género, los mariscos y pescados para la plancha sí suben algo porque tienen más demanda ahora. El problema es que los restaurantes se meten en las lonjas cuando deberían comprar en el mercado. Ellos pueden pagar lo que sea en lonja porque luego venden las gambas a 180 euros el kilo, pero yo no las puedo poner tan caras, a más de 80 no me las compran los clientes.

¿Qué pescados hay que comprar ahora?

Ahora hay que aprovechar para consumir nuestro marisco del Mediterráneo, están huevadas las gambas, quisquillas y cigalas, mientras que los del norte están mejor para Navidad. También el atún, la sardina y los boquerones.

¿Hay problemas ahora con alguna especie?

El atún, del que tanto se ha hablado, se está recuperando muy bien. Ahora el problema está con los pescados de escama, los que normalmente tomamos al horno, como la lubina, la dorada, el sargo o el besugo. Los buenos salvajes están a 40 euros o más el kilo y no están más caros gracias a que hay piscifactorías que si no, costarían más que el kilo de gamba roja. Nos estamos quedando sin ellos por culpa de los arrastreros.

Dígame para usted ¿qué pescado serían el alcalde, el presidente de la Generalitat y el presidente del Gobierno?

Uff... al alcalde le conozco, y yo diría que es una palalla por hacerle la broma con el pelo. Este pescado es muy de aquí y se le conoce como peludo. Ximo Puig me recuerda más a un besugo y Mariano Rajoy a una gallina o cabracho.