Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Nacras: SOS

El molusco más grande del Mediterráneo se da por extinguido en el fondo marino alicantino por culpa del ataque fulminante de un parásito

En los últimos meses, las nacras han dejado de estar clavadas entre la Posidonia oceanica, y ahora aparecen muertas, tumbadas sobre la arena. instituto de ecología litoral

El ecosistema submarino de Alicante se ha quedado sin nacras. El molusco más grande del Mediterráneo, la Pinna nobilis, muy apreciado desde la antigüedad y auténtico termómetro para medir la salud del mar, se da prácticamente por extinguido en todo el litoral alicantino, incluida la reserva marina de Tabarca, donde se conservaba una de sus principales poblaciones hasta hace unos meses. Esta vez la causa de su desaparición no ha sido pesca de arrastre, el anclaje de embarcaciones, la contaminación o la extracción ilegal con fines decorativos.

La causa de esta mortandad se debe a un protozoo parásito que destruye la glándula digestiva de los individuos, muriendo al poco tiempo de ser infectados. Durante el verano de 2017, la red de voluntariado POSIMED ha certificado la crítica situación por la que atraviesa la especie, no habiendo encontrado ninguna nacra viva en más de 30 estaciones de muestreo a lo largo de la costa alicantina.

La nacra es una especie endémica del mar Mediterráneo y está considerado como uno de los bivalvos de mayor tamaño del mundo, que habita principalmente en praderas de fanerógamas marinas como Posidonia oceánica. Tiene una gran longevidad (entre 30 y 40 años) y tamaño (llegando a medir hasta 1 metro de longitud). Para su protección, la Pinna nobilis fue incluida en 2014 en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. Pero fue a finales del verano de 2016 cuando saltó la alarma. Primero en aguas de Andalucía, la mortalidad de la nacra alcanzó el 100 % en algunas zonas. Posteriormente, el fenómeno se extendió hacia otras zonas de la costa mediterránea española, como Murcia y las Islas Baleares. Y ahora se puede afirmar, sin lugar a dudas, que en la Comunidad Valencian, en octubre de 2016, los investigadores del Instituto de Ecología Litoral de El Campello (IEL), observaron altas mortalidades de nacras, superiores al 90%, en la reserva marina de la isla de Tabarca.

Para poder comprobar el origen de esta mortandad, previa autorización de la Dirección General del Medio Natural de la Generalitat Valenciana, se extrajeron del fondo marino varios individuos vivos, que fueron enviados para su análisis a un laboratorio especializado. De los resultados obtenidos se concluyó que el alcance y origen de esta rápida mortandad en la especie Pinna nobilis estaría producida por un protozoo del género Haplosporidium, causante de otros eventos de mortalidad masiva de bivalvos en otras partes del mundo.

Especialistas en este molusco de todo el país se reunieron el pasado marzo en el Instituto Español de Oceanografía, con sede en Palma de Mallorca, encuentro al que asistió el biólogo Santiago Jiménez, del IEL. Allí se compartieron datos y se dio por hecho que la mortandad de la nacra se ha ido extendiendo de Sur a Norte del Mediterráneo español. Además de un pequeño reducto en las Islas Columbretes, frente a Castellón, la barrera del parásito fulminante, hasta el momento, se ha situado en el Delta de l'Ebre, al inicio de las costas de Cataluña.

Compartir el artículo

stats