El Colegio de Podólogos de la Comunitat recomienda el uso de un calzado adecuado y sujeto para prevenir lumbalgias, dolores de espalda o problemas en la postura general, que aumentan en verano por el uso excesivo de chanclas y zapatos planos al no proporcionar un buen apoyo para el pie.

La podóloga y vicepresidenta del colegio de Podólogos de la Comunitat, Estefanía Soriano, ha explicado, en declaraciones a Efe, que la fascitis plantar (dolor en la planta del pie) es "uno de los motivos de consulta en auge durante los meses de septiembre y octubre" por el abuso de zapatos planos durante la época estival.

Soriano ha indicado que "el calzado excesivamente plano hace sufrir al sistema aquíleo-calcáneo-plantar, el encargado de realizar el primer movimiento del paso".

Los zapatos como chanclas o manoletinas poseen una suela muy fina carente de amortiguación, por lo que el pie absorbe los impactos contra el suelo de forma directa.

La podóloga advierte de que el uso de este tipo de calzado especialmente en niños y adolescentes con problemas como piernas arqueadas o pies hacia adentro tenderá a perjudicar y agravar dicha dolencia.

"Cada vez que el talón entra en contacto contra el suelo, nuestro tobillo se flexiona gracias a la tensión del tendón de Aquiles", que será mayor con el uso de calzado muy plano y dará lugar a los temidos dolores en la planta del pie e, incluso, en tobillos y gemelos debido a la sobrecarga muscular, según Soriano.

El Colegio de Podólogos de la Comunitat aconseja a hombres y mujeres utilizar un calzado con un tacón de cuatro centímetros, con buena amortiguación, para que el pie pueda trabajar sin sobresfuerzo en la marcha habitual.

"El pie es el último vagón de nuestro cuerpo y debemos cuidarlo", razón por la cual se debe "moderar" el empleo de "las chanclas para largas caminatas", ha señalado Soriano.

Algunas de las causas que propician la aparición de dolores en la planta del pie son el sobrepeso, el calzado inadecuado, los pies planos o una intensa actividad deportiva.

Lo sufren tanto hombres como mujeres, y, generalmente, aparece a partir de los 30 años, pero dependen de muchos factores y de las condiciones físicas de las personas.

Por ejemplo, el tamaño de los pies influye en la aparición de este dolor en la planta, pues un pie pequeño tiende a concentrar mayor tensión que uno más grande, en el que se reparte por toda la superficie plantar.

El dolor en la planta del pie suele ser mayor por las mañanas, ya que la fascia se contrae durante la noche, pero, al iniciar los primeros pasos del día, vuelve a estirarse provocando mayores molestias.

Un remedio casero para aliviar estos dolores es realizar, con una botella de agua congelada, movimientos rotatorios por toda la planta del pie.

El tratamiento para este tipo de problemas depende de cada caso y va desde los antiinflamatorios hasta el uso de plantillas o, incluso, la cirugía de la fascia en casos más graves.

"No hay un tratamiento específico porque cada paciente es diferente; por lo tanto, primero se debe hacer un estudio biomecánico previo y, a partir de ahí, tomar medidas", ha especificado Soriano.

La podóloga ha afirmado que "es igual de perjudicial un zapato plano como otro con mucho tacón", por lo que se sugiere no dejarse llevar ni por modas ni por una falsa sensación de comodidad.