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Un servicio cada vez más contestado

La sustitución de los aparatos de Iberia Express por los de la compañía valenciana provoca el malestar de los clientes

Iberia ha ido dejando en los últimos años casi todos sus vuelos en Alicante e, incluso, a finales de 2013 cerró su oficina en la terminal, ahora atendida por una empresa subcontratada. Atrás quedaron ya los tiempos de Iberia como una de las grandes empresas de la ciudad de Alicante, no ya sólo por sus oficinas en el centro (Paseo de Soto), sino por sus conexiones directas con Paris, Frankfurt, Amsterdam, Madrid, Barcelona, Canarias, Baleares, Sevilla o Bilbao. Hace dos años volvió con Iberia Express, pero el pasado julio volvió a retirarse para dejar paso a Air Nostrum. Algo que ha creado un gran malestar entre los pasajeros habituales del corredor aéreo Alicante-Madrid, que denuncian la mala calidad del servicio. El avión más grande de Air Nostrum tiene capacidad para 105 plazas pero tampoco puede servirse de las pasarelas para facilitar el embarque y desembarque del pasaje.

La primera marcha de Iberia, entonces empresa pública, del aeropuerto en 1991 provocó la reacción de los empresarios que organizaron una manifestación, apoyada por el PP. Mil personas recorrieron las calles de Alicante. Cuatro años después el PSOE perdió la Generalitat.

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