Una ciudad más compacta, reurbanizando los espacios estratégicos públicos para hacer una ciudad más amable, crear un centro intermodal de transporte integrado que facilite la movilidad, impulsar nuevos sectores productivos y dotar de eficiencia y eficacia a la gobernanza municipal en una sociedad que contribuya a la reducción de las emisiones de CO2 y que se implique en la educación. Así, a grandes pinceladas, es la ciudad que quieren los alicantinos, según se desprende de las primeras conclusiones surgidas de la conferencia estratégica sobre el Plan Ciudad que se celebró a principios del pasado mes de junio. Sin embargo, los alicantinos y las entidades sociales que participaron en aquella cita en el ADDA, que fue el pistoletazo oficial en la elaboración del Plan Ciudad, descartan como prioridades que el Ayuntamiento se endeude a largo plazo, diseñar estrategias de competitividad con otras ciudades, apostar por el turismo sobre memoria histórica y afrontar las colonias de gatos desde un punto del control poblacional y de la mejora de las condiciones de bienestar animal.
El concejal de Presidencia, Natxo Bellido (Compromís), acompañado por los portavoces de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, y PSOE, Eva Montesinos, presentó ayer las conclusiones de la primera conferencia estratégica, que según afirmó «constituyó el mayor proceso de debate colectivo realizado en la ciudad, ya que contó con la participación de 350 personas, entre ellas representantes de más de un centenar de entidades, instituciones y colectivos».
Según el cronograma que maneja el tripartito, el Plan Ciudad tiene marcados en rojo dos meses: noviembre y febrero. En esas fechas se celebrarán sendas mesas de trabajo con colectivos previas a la segunda conferencia estratégica, prevista para el próximo mes de abril. De ahí, según Bellido, saldrá un documento propositivo sobre el futuro que quieren los alicantinos para su ciudad.
