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La UTE que limpiará los colegios deja en el aire el futuro de la plantilla

La unión de empresas logra la mejor puntuación pese a ser la única que no suma los 8 puntos al no comprometerse a mantener los empleos

La UTE que limpiará los colegios deja en el aire el futuro de la plantilla

La UTE formada por Clece y Fissa, la única candidata al contrato de limpieza de colegios y dependencias municipales que no garantiza el mantenimiento de la plantilla durante los dos años de contrato, ha conseguido la mejor puntuación en el procedimiento abierto por el Ayuntamiento de Alicante. La UTE ha logrado un total de 81,88 puntos (sobre un máximo de 100), seguida de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), con 79,25, que ahora se encarga del servicio tras un contrato de urgencia firmado el pasado mes de febrero tras la renuncia de una sociedad de Enrique Ortiz, que prestó el servicio fuera de contrato durante dos años.

La clasificación final de los siete candidatos, a la que ha tenido acceso este diario, está previsto que vaya hoy a la Mesa de Contratación, convocada a las 10 horas en el Ayuntamiento de Alicante.

La UTE que se ha impuesto en el procedimiento logró 31 puntos entre los criterios de valoración que dependen de los juicios de valor, donde se examinan los medios humanos, el proyecto de prestación del servicio y la maquinaria, frente a los 14,25 puntos que obtuvo la segunda clasificada en la tabla final y aspirante que presentó la mejor oferta económica con 14,14 millones al año. Clece y Fissa, con una propuesta de 14,25 millones de euros, han sumado un total de 81,88 puntos, pese a no contar con los ocho que el Ayuntamiento incluía en el pliego para las candidatas que se comprometiesen a mantener en sus puestos de trabajo, durante el periodo de vigencia del contrato, al personal adscrito al servicio, «salvo en los casos de extinción de la relación laboral por voluntad de los trabajadores, jubilación, fallecimiento o despido disciplinario».

Así, de poco servirá la decisión del tripartito de Alicante, tomada a finales del pasado año, de anular la licitación con el objetivo de incluir cláusulas sociales tras la amenaza de la plantilla, formada por unas 400 personas, de iniciar una huelga. Esta decisión obligó al equipo de gobierno a seguir pagando fuera de contrato a Ortiz, que finalmente cobró unos 15 millones de euros por prestar este servicio fuera de contrato.

Dos meses después, el pasado febrero, la Junta de Gobierno del Ayuntamiento logró aprobar el nuevo pliego de condiciones del servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales, donde se premiaba a las empresas que se comprometieran a mantener los puestos de trabajo durante los dos años que se prolongue el contrato (con una posible prórroga de otros dos), ya que la subrogación es obligada por ley.

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