El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, ha censurado hoy la decisión del alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, de no colgar en la fachada del Consistorio una pancarte en memoria de Miguel Ángel Blanco, asesinado por ETA el 12 de julio de 1997 (mañana hace 20 años) y cuya muerte dio un giro copernicano hacia la percepción que se tenía de organización terrorista en el País Vasco y en España en generan con el nacimiento del llamado "Espíritu de Ermua", municipio del que Blanco era edil del PP. Nada fue igual desde entonces y hoy, 20 años después, la banda forma parte de la historia.

"El alcalde se equivoca porque el reconocimiento a Miguel Ángel hubiera sido un homenaje a todas las víctimas. Ha faltado sensibilidad hacia las víctimas y hacia los propios ciudadanos", ha subrayado Moragues tras finalizar su visita al Puerto de Alicante, donde se ha cuumplido un mes del inicio de la Operación Paso del Estrecho, en la que se prevé que 55.000 magrebíes pasen por la terminal de Argelia hasta el 15 de septiembre.

La terminal marítima del Puerto está operativa las 24 horas del día, y en la misma hay de refuerzo cuatro traductores y cuatro asistentes sociales contratados al efecto. El operativo se monta para atender a los miles de europeos de origen magrebí que utilizan el puerto para embarcar rumbo a sus ciudades de origen en vacaciones.

La naviera argelina que conecta Alicante con los puertos de Argel, Orán y Mostaganem utilizará cuatro barcos y tiene previstas 40 rotaciones entre el 15 de junio y el 15 de septiembre. Habrá barcos todas la semana y en los días punta hasta dos buques diarios. Aunque no hay un nivel de alerta especial, los últimos atentados terroristas en diferentes capitales europeas han hecho que se potencie la presencia policial, tanto en el Puerto como en la ciudad. A la Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Local y Policía Portuaria. Apoyados por voluntarios de la Cruz Roja y Protección Civil, que se ocupan del tema social y sanitario.