Nace la Policía Turística de Alicante. El Ayuntamiento pone esta semana en marcha este servicio con la contratación de 29 nuevos agentes para reforzar durante todo el año la vigilancia en las zonas de mayor afluencia de visitantes, a los que hay que sumar otros 24 funcionarios que se van a incorporar también de inmediato para el servicio estival de playas, al igual que se hizo el pasado verano, y así evitar una merma en los efectivos de los barrios.

El edil de Seguridad, Fernando Marcos, explicó a este medio que está previsto llevar a Junta de Gobierno mañana un expediente para contratar 53 nuevos agentes de Policía Local interinos a través de la bolsa de empleo, «de los cuales 24 irán destinados a la unidad de playas y 29 van a reforzar de forma permanente la seguridad en las zonas turísticas de nuestra ciudad». Marcos manifestó que «desde el PSOE hemos conseguido comenzar a dar solución al problema de la falta de personal en la Policía Local que generaron los 20 años de mala gestión y desgobierno del PP», recordando que «con sus políticas de recortes» consiguió que Alicante perdiera y amortizara «más de 40 plazas de policía que tanta falta hacen ahora en nuestra ciudad», con una plantilla que sin las nuevas incorporaciones tiene 532 agentes.

Por su parte el alcalde Gabriel Echávarri mostró su satisfacción por este aumento de efectivos, destacando que «la seguridad siempre ha sido una prioridad y si no fuese por la lamentable situación económica en la que encontramos el Ayuntamiento, hace tiempo que hubiésemos reforzado la plantilla». El primer edil señaló que siempre ha sido consciente «de la importancia del turismo como motor económico», y para consolidar Alicante como un destino turístico de calidad es importante «seguir trabajando para ampliar todo tipo de servicios».

El objetivo de este proyecto es crear un grupo de policías especializados que presten vigilancia permanente en las zonas turísticas, y evitar que se resten agentes de barrios para ponerlos en las playas, «como se hacía en pasadas legislaturas», recuerdan desde Alcaldía.

Con esta medida el Ayuntamiento cristaliza una sus promesas de crear un servicio propio y fijo de Policía Turística, que se encargará por un lado de incrementar de forma permanente la seguridad ciudadana en las zonas de mayor afluencia de turistas, y por otro lado dar una mejor atención a las necesidades de las personas que visitan la capital durante todo el año.

Desde el equipo de gobierno recuerdan que el turismo ha dejado de ser estacional y «nuestra ciudad recibe ahora miles de visitantes durante todos los días del año, por ello es necesario además de reforzar la vigilancia en las playas hacerlo de forma fija en las zonas más turísticas como en la Explanada, las estaciones de autobuses, el paseo del Postiguet, las zonas turísticas y los entornos más visitados de nuestra ciudad, en el centro tradicional y Casco Antiguo, entre otros», por lo que serán estas zonas en las que se centrará la actividad de la Policía Turística. Estos 29 agentes interinos tendrán un coste para las arcas municipales de cerca de 1,3 millones de euros al año, «un esfuerzo económico muy importante que supone que por primera vez en al menos una década se aumenta de forma relevante la plantilla policial».

Conocimientos en inglés

Con este refuerzo de la vigilancia se busca reducir en los entornos turísticos los pequeños hurtos, proporcionando también de forma preventiva al turista información y consejos sobre las medidas de seguridad que debe adoptar para evitar que se convierta en víctima, y también se va a poder atender mejor a los extranjeros con estos nuevos agentes, que han tenido que acreditar conocimientos de inglés en las pruebas de la oposición de la bolsa.

Las mismas fuentes recuerdan que la contratación el pasado verano de 24 agentes interinos para el dispositivo de playas dio unos resultados «muy buenos», por lo que este año no solo repiten sino que se dobla con otros 29 agentes para la Policía Turística.