Sin personal que sustituya a sus compañeros de vacaciones y con trabajo «extra». Así se sienten los médicos del centro de salud de San Blas después de que la dirección del centro les haya comunicado que se tienen que hacer cargo de los 80 ancianos de la residencia Virgen del Remedio.

El médico de esta residencia, que está gestionada por una obra social pero tiene plazas subvencionadas por la Conselleria de Igualdad, está de baja y según le ha comunicado la dirección del centro de salud a los médicos «le está siendo imposible encontrar a un sustituto».

Así las cosas, y según se les ha hecho saber a través de una circular, durante los dos próximos meses los facultativos del centro de salud deben asumir las consultas, las recetas o los avisos domiciliarios que los residentes de este centro puedan requerir. Algo que ha indignado al Sindicato Médico. «Se trata de una residencia privada, por lo que debe ser esta la que resuelva el problema de encontrar un médico sustituto y no la Conselleria de Sanidad quien le resuelva la papeleta, porque está sentando un precedente muy peligroso», critican desde este sindicato. Además, recuerdan que la ley obliga a este tipo de centros geriátricos a contar con un médico propio. El Sindicato Médico también recuerda que en verano no se sustituye a casi nungún médico que está de vacaciones, por lo que la carga de trabajo estos meses es considerable. «Al trabajo diario se suma ahora el seguimiento de estos 80 ancianos, en su mayor parte personas muy enfermas que demandan gran atención. La sobrecarga de trabajo va a ser excesiva».