Ximo Puig vive su momento más delicado desde que llegó a la presidencia de la Generalitat hace ahora dos años. Y nada tiene que ver con la gestión del Consell. Responde a las dinámicas cainitas y autodestructivas en las que hace demasiado tiempo se mueve el socialismo valenciano. Dirigentes del PSPV próximos al jefe del Consell admiten, en estos momentos, más lealtad de sus socios de gobierno que de muchos dirigentes de su propio partido que alientan la rebelión para derrocar a Ximo Puig como máximo responsable de la formación. Poca broma. En las primarias del PSPV está en juego la estabilidad del Consell. Durante su visita a Alicante para participar en las fiestas de Sant Joan, tres destacados protagonistas del Pacte del Botànic compartieron una imagen cargada de simbolismo. El presidente de las Cortes y uno de los líderes de Compromís, Enric Morera; el síndic parlamentario socialista, Manuel Mata, hombre de confianza de Puig; y Antonio Montiel, portavoz de Podemos en las Cortes y uno de los firmantes del Pacte del Botànic junto al propio Puig y a Mónica Oltra. Los tres junto a la Bellea del Foc de Alicante, la Fallera Mayor de València y la Reina de las Fiestas de Castellón.

Una imagen, dicen, vale más que mil palabras. Y la foto -en vísperas de que lleguen a Alicante el propio Puig y Rafa García, el candidato alternativo para hacerse con el mando del PSPV que impulsan los «sanchistas» con el visto bueno de Ferraz- supone un aviso a navegantes: los tres socios del Botànic no están dispuestos a dar ni un paso atrás frente a la crisis de los socialistas. Morera, hombre de paz y partidario de grandes consensos, estuvo acompañado en su visita, entre otros, de los concejales de Compromís en el Ayuntamiento de Alicante con Natxo Bellido y María José Espuch que hoy harán de «cicerones» de Joan Baldoví, portavoz de Compromís en el Congreso. Acudió a la mascletà y comió en una barraca próxima al Mercado. Manuel Mata, excelente orador y con gran prestigio dentro del PSPV, es una pieza clave de la campaña de Ximo Puig para tratar de darle la vuelta al marcador. Va a protagonizar un volumen de actos en agrupaciones muy parecido al del presidente de la Generalitat. Estuvo acompañado de diputadas alicantinas como Ana Barceló, Noelia Hernández o Rosa Mustafá. Antonio Montiel, síndic parlamentario de Podemos, visitó la ciudad acompañado de Llum Quiñoñero -número uno a las Cortes por Alicante- casi como antesala de la presencia hoy en las fiestas de Antonio Estañ, diputado natural de Callosa de Segura y nuevo secretario general de los morados en la Comunidad Valenciana.

Frente a la solvencia que trató de ofrecer el Botànic, los socialistas continúan en su enredo. Una de las conversaciones más significativas fue la del alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, alineado con Puig en este proceso, con el exsenador Ángel Franco y con otro histórico del socialismo alicantino José Antonio López Berruti, convencidos de la victoria del presidente de la Generalitat y, como siempre, pendientes de mil y una conspiraciones. Hoy el jefe del Consell ya estará en la provincia. Acudirá a media tarde a un acto en Alcoy y, posiblemente, esta noche ya se imbuirá del ambiente fogueril en un paseo por alguno de los monumentos más emblemáticos. Para el día de Sant Joan, el presidente de la Generalitat tiene previsto pasar gran parte de la jornada en Alicante. Su rival en las primarias, el alcalde de Burjassot, Rafa García, acudirá a la mascletà de Luceros y compartirá mesa y mantel en una barraca. La hoguera socialista ya está en marcha.

En el otro lado del tablero político, el PP vive con cierta placidez después del pacto que casi garantiza la tranquilidad en la capital. José Císcar volvió a la ciudad junto, entre otros, a su secretario provincial Eduardo Dolón; al coordinador general, Rafa Candela; a la senadora Asunción Sánchez Zaplana; y a diputados en las Cortes como Juan de Dios Navarro y Elisa Díaz. También estuvieron en la mascletà el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Alicante, Luis Barcala; el vicepresidente de la Diputación, Carlos Castillo; o el subdelegado del Gobierno, José Miguel Saval. Ciudadanos hizo casi pleno. Los cinco concejales - Yaneth Giraldo, Vicente Buades, Antonio Manresa, María José Molina y Juanfran Escudero- para arropar a su síndica parlamentaria, Mari Carmen Sánchez; al coordinador autonómico, Emilio Argüeso; y el senador Luis Crisol. Los de Albert Rivera no podrán pasearse hoy con tanta calma.