Las Hogueras se han convertido en uno de los motores de la economía de Alicante pese a lo baratas que le salen a las administraciones, que apenas se dejan un millón en subvenciones públicas directas sobre la celebración. La Fiesta genera un impacto económico, según informes de la Universidad de Alicante y del Ayuntamiento, de unos 70 millones de euros, entre lo que el turismo se deja en alojamiento, bares y restaurantes (unos 50 millones), y lo que ingresa el comercio y el transporte (20 millones). El gasto medio por visitante es de 70 euros. Y se espera un millón de personas a lo largo del fin de semana. Todo esto con sólo cuatro millones invertidos en su organización, de ellos tres millones de las comisiones en el monumento y el entramado festero, y un millón más de las subvenciones públicas.

El peso de la Fiesta es tal que la ocupación hotelera será un 13% más elevada que en 2016, según la encuesta de la Asociación Provincial de Hoteles, dato que pone en valor el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer. «Les Fogueres se consolidan como un atractivo turístico fundamental de nuestra oferta y esto se refleja también en la ocupación, y va en la línea que se observa desde principios de año», con 528.046 visitantes que han pernoctado en los hoteles de Alicante (34 establecimientos y 3.100 habitaciones). Del 20 al 24 de junio, la ocupación esperada es del 95% en los hoteles.

En apartamentos será del 98%, según el estudio que ha realizado el comparador online de casas y apartamentos vacacionales Hundredrooms. Según este informe, en Alicante hay algo más de un millar de casas y apartamentos.

El precio medio es de 215 euros por noche en apartamentos y casas para dos personas y de 340 euros para grupos de cuatro personas. Según este estudio, los precios se disparan un 40%. El Patronato Municipal de Turismo destaca el fenómeno de los apartamentos y el importante auge estas fiestas, por la gran demanda sobre todo de familias con niños. «La ciudad va a estar al 100%», señala el alcalde, Gabriel Echávarri.

Las Hogueras generan una actividad que se convierte en el sostén económico de miles de familias. Los artistas y sus equipos de carpinteros, escultores y pintores; las tiendas de indumentaria y disfraces; los floristas; los músicos; la seguridad privada para que los monumentos plantados no sufran actos vandálicos y para evitar incidentes en los recintos festeros; personal de infraestructuras responsables de escenarios y vallas; imprentas para los llibrets...Y de forma indirecta beneficia a hostelería y comercio, sectores en los que se generan más de 14.000 empleos en la semana de Hogueras.

Todo esto es posible gracias a los 7.790 foguerers y barraquers inscritos en las comisiones. Ellos sostienen la Fiesta con sus cuotas puesto que la colaboración de los vecinos a través de las cartillas y de los comercios sigue bajando. «El barrio que más colabora, Florida Portazgo, tiene entre 500 y 600 cartillas. Antes eran muchas más, por encima del millar, pero cada vez más viviendas son adquiridas por personas que no son de aquí o por extranjeros que no colaboran, y que cuesta mucho implicar», dice el presidente de la Federación de Hogueras, Manuel Jiménez.

Ante la caída en los ingresos de vecinos y comerciantes, y la limitada aportación de las administraciones públicas, las empresas privadas se han convertido en un sostén de la Fiesta: la aportación de los patrocinadores alcanza la mitad del presupuesto anual de la Federación de Hogueras, y un 20% de los ingresos anuales de las comisiones que plantan en Especial, que mueven más de 100.000 euros de presupuesto.

«Ni de broma podríamos hacer todo lo que hacemos sin el sector privado, muchos actos se habrían perdido. Las Hogueras son una fiesta muy esponsorizada», afirma Jiménez. De hecho, las mascletàs de Luceros están patrocinadas.

Un aspecto en el que abunda el vicepresidente de Economía de las Hogueras, Manuel García. «Ahora mismo, la subvención del Ayuntamiento a la Federación (220.000 euros, la mitad que en 2011) es tan importante como el conjunto de patrocinadores. Si no fuera por la empresa privada no se mantendría la estructura de la Fiesta como la conocemos». Porque la Federación no cobra cuotas a los festeros, que pagan directamente a sus hogueras y barracas.

A nivel de comisiones, la principal fuente de ingresos son las cuotas de socios y la subvención municipal al monumento. Sólo en las hogueras más grandes suman los patrocinadores. Las de barrio son las que más sufren, «por desgracia la colaboración del gran comercio, la hostelería y la restauración es puntual, pese a ser los más beneficiados por la Fiesta».«No son conscientes pese a que hacen el mayor negocio en Hogueras».

El Ayuntamiento aporta 220.000 euros a la Federación de Hogueras y 352.000 a las comisiones por el monumento, además de 60.000 euros en promoción. La Generalitat asigna 30.000 euros a las Especiales, 43.000 por los llibrets y 11.000 a las mejores hogueras; y la Diputación aporta 85.000 euros entre promoción y cultura.