La futura ley de Salud de la Comunidad Valenciana establecerá específicamente que la gestión sanitaria será «preferentemente» directa y de carácter público, porque da «más equidad» en el acceso a los servicios, sin excluir la colaboración de la sanidad privada como complemento, nunca como sustitución.

El Consell aprobó ayer este anteproyecto de ley, un texto que nace con el objetivo de «acomodar el Sistema Valenciano de Salud a los retos y complejidad de la gestión asistencial de salud», según precisó el conseller de Transparencia, Manuel Alcaraz.

La norma se orienta a dar rango de ley a la universalidad de la atención sanitaria, a la gestión pública como garantía de calidad, a impulsar la atención en salud mental, a garantizar la prestación farmacéutica integral y a potenciar la actividad investigadora.

La consellera Carmen Montón ha asegurado que se reorganizará el sistema valenciano de salud en áreas supradepartamentales, para lograr una mejor cobertura asistencial a la población y un mayor aprovechamiento de los recursos públicos, aunque ha precisado que no desaparecen los departamentos actuales, sino que habrá un nivel organizativo por encima de ellos. El objetivo de esta reorganización es, según ha explicado, poder optimizar los recursos públicos existentes, al permitir crear alianzas y compartir algunos de ellos, y trabajar en red para que los pacientes tengan claro cuál es su hospital de referencia para tener el cien por cien de la prestación sanitaria garantizada.

Otro de los aspectos novedosos es la incorporación de la salud mental a la ley. La reforma de la norma aborda aspectos relativos a la coordinación entre las consellerias con competencias en materia de Sanidad y en materia de Igualdad y Políticas Inclusivas para proporcionar una atención integral a la salud mental, mediante el desarrollo de programas transversales e interdisciplinares que garanticen la continuidad de cuidados y disminuyan la variabilidad entre los departamentos de salud. El objetivo de todas las actuaciones en salud mental se orienta hacia la recuperación, inclusión social y participación activa de las personas con trastornos mentales.

La modificación de la ley incorpora también un artículo relacionado con la donación, los trasplantes de órganos y las células madre dirigido a promover las actuaciones necesarias para fomentar la donación voluntaria y gratuita de sangre, órganos, tejidos y células.