Los bebés deben dormir boca arriba con la cabeza a un lado. Así se logra reducir con esta práctica más del 40% de la muerte súbita del lactante. Este es uno de los consejos que el pediatra Antonio Redondo, junto a su colega Raquel Velasco y la fisioterapeuta Sara San Cristóbal darán hoy a los padres que acaban de tener a su recién nacido. Esta práctica permite además que no se deforme la cabeza de los bebés.

El colecho, que el bebé duerma con los padres, no está recomendado y la Asociación Española de Pediatría advierte de que puede provocar la muerte por asfixia o aplastamiento del bebé.

Los profesionales ofrecen hoy una charla sobre los cuidados del recién nacido dentro de los "Sábados pediátricos" que organiza el Hospital Vithas Medimar Internacional a la que se espera la asistencia de medio centenar de asistentes. Se abordarán técnicas como la de piel con piel, la lactancia materna, el biberón, diferentes pruebas como la de la audición o el talón y la información de las vacunas.

"Los bebé vienen sin manual de instrucciones y no hay enciclopedias por eso hacemos estos "Sábados pediátricos" para que tengan argumentos antes de que llegue el niño", explica Redondo, con 35 años de ejercicio a sus espaldas. El pediatra reconoce que los padres no llegan con temores y sí muy abiertos a aprender.

"Es bueno que el entorno opine y que los padres tengan responsabilidad desde el principio. Eso puede ser bueno, aunque a veces las opiniones no encajan con la realidad actual", en referencia a las distintas opiniones sobre la lactancia que se dan en la familia y que pueden confundir a los padres. "Al niño hay que ofrecerle la mejor alimentación. Nosotros promovemos la lactancia materna, pero es incómoda y si la persona no tiene los argumentos necesarios puede claudicar".

El pediatra añade que hay que ofrecer al bebé lo mejor pero ello no debe suponer agobiar a la madre si no puede o por decisión personal decide no amamantarlo. "Hay que dar información sin ser fundamentalista", añade. Entre otras, los profesionales van a abordar la técnica piel con piel, poner al bebé sobre el vientre de la madre lo que genera el primer vínculo afectivo nada más nacer.

Redondo explica que el nacimiento de un bebé puede ser motivo de unión de la familia, aunque advierte que el nuevo miembro no debe de convertise en el centro y explica que "lo tenemos que querer, pero no adorar". El pediatra reconoce que en algunos casos hay excesiva sobreprotección hacia los niños "que no le dejan crecer de forma natural" y añade que "una familia es una empresa que dirigen el padre y la madre, el niño no puede dirigir la familia con 20 meses. Estamos enseñando hábitos, eso significa mucha afectividad, pocas normas pero claras y que se puedan cumplir. No pasa nada porque la palabra "no" esté en el vocabulario, ayudamos y no frustramos".

Incorporar a un recién nacido al entorno desde el primer momento es bueno si el pequeño ha nacido con el peso y las medidas adecuadas. Se va adaptando a lo que le rodea, pero siempre guardando medidas de protección. Hay que llevar cuidado para que no esté cerca de personas acatarradas, ni en ambiente con humo de tabaco ni de fritos. Los pediatras insisten que también protege su salud ponerles las vacunas correspondientes, y apuntan que hay familias que deciden no vacunarlos y no creen que sea adecuado.

Sobre las nuevas tecnologías, los profesionales advierten de la influencia de las pantallas en niños menores de dos años porque frena su desarrollo natural psicomotor "los niños están parados y no reptan, juegan ni persiguen", explica Redondo, quien explica que a partir de los 13 ó 14 años es cuando deberían tener móvil propio, pero no cree que sea bueno adelantar este momento.

El "Sábado pediátrico" consta de dos partes, la de la información que proporcionan los profesionales y también la parte de las dudas que plantean los padres. El doctor Redondo explica que se trata también de un momento enriquecedor que sirve tanto a los profesionales como a las familias en la aventura de convertirse en cuidadores de un nuevo ser, que llega sin manual bajo el brazo.