El Consell se ha propuesto llevar a la práctica en el plazo de dos años uno de los objetivos a los que reiteradamente se ha referido el propio president, Ximo Puig, como imprescindibles para el progreso de la Comunidad: la inversión en Ciencia.

La puesta en marcha de un nuevo programa de inversiones denominado Pla Gent-Generació Talent,pretende devolver a las universidades y centros de investigación de la Comunidad buena parte de los 1.300 investigadores que se fueron a consecuencia de la crisis durante los años 2011 y 2015.

Para la contratación de estos científicos, junto a otras medidas que impulsen la investigación, se destinarán 61,6 millones de euros entre las anualidades 2017 y 2018, según los datos aportados desde el Consell.

Fuga

Este plan para atraer el talento y acabar con la fuga de cerebros «no es una meta», -añadió el presidente durante su presentación pública- sino que «aspira a ser el detonante de oportunidades para una generación».

«Pueden ser la palanca de cambio de nuestro modelo productivo», abundó Ximo Puig en referencia a los científicos que se fueron porque aquí no veían futuro.

El nuevo programa incluye una serie de medidas como la citada contratación de jóvenes investigadores por las universidades y los centros de investigación, así como de doctores «para desarrollar proyectos en empresas valencianas».

También se contemplan «apoyos directos a la investigación y para el desarrollo empresarial», así como para la creación de empresas de base tecnológica que son las que tienen su origen en el trabajo de los investigadores de las propias universidades.

Este programa para el impulso de la Ciencia lo anunció brevemente la semana pasada en Alicante el conseller de Educación, Vicent Marzà, con motivo de su exposición sobre los próximos retos que se abren para la enseñanza invitado por el Foro Club INFORMACIÓN-Universidad-Bankia. Entonces remitió para los detalles a una «próxima presentación por parte del president, Ximo Puig», que fue la que tuvo lugar ayer.

El grueso de la inversión se dirige a mejorar la oferta científica en las universidades y los centros de investigación porque se calcula que la fuga de cerebros ha afectado al 10% del talento científico cuantificado en la Comunidad, tal y como contempla el trabajo desarrollado por los secretarios autonómicos de Educación e Investigación, Miguel Soler, y de Empleo, Enric Nomdedéu.

«Se pretende hacer revertir la situación originada por la marcha de nuestros científicos», certificó Puig.

Las diferentes actuaciones previstas aúnan hasta 14 medidas resumidas en la atracción del talento, la contratación de investigadores propios, el respaldo a los recién titulados para favorecer la creación de empresas y la mejora de la formación.