El Palacio de Congresos de Aguadulce, en Almería, se quedó ayer pequeño en el penúltimo encuentro empresarial para exigir el el Corredor Mediterráneo con la participación de cerca de mil altos directivos de Alicante, Valencia, Castellón, Andalucía y Cataluña. El objetivo no era otro que insistir al Gobierno en la necesidad de acelerar las obras para implantar el ancho ferroviario AVE entre Algeciras y Barcelona, obra que el Gobierno no tiene previsto acabar al completo hasta 2025. Los empresarios volvieron a mostrar músculo y unidad frente a los incumplimientos del Ministerio de Fomento y anunciaron que la «traca final» será el próximo 3 de octubre en Madrid, para la que la Asociación Valenciana de Empresarios (Ave) quiere movilizar a dos mil directivos empresariales.

Tras los encuentros en Murcia, Tarragona, Valencia y Villena, los empresarios se trasladaron ayer hasta Almería, que por no tener no tiene ni conexión ferroviaria directa con Alicante y el tren a Madrid tarda seis horas y media. Los empresarios viajaron en avión porque de haberlo hecho en tren, el viaje hubiera durado casi diez horas, en función del tiempo de conexión con Madrid. La patronal chequeará el mes que viene el estado de las obras y ayer anunció que el último gran encuentro será el 3 de octubre en Madrid.

Los problemas que provoca el retraso del Corredor Mediterráneo son los mismos para las comunidades valenciana, murciana y andaluza, pero la situación tiene sus derivadas en cada provincia. Así, Valencia y Alicante cuentan desde hace ya unos años con una línea de Alta Velocidad para pasajeros que les conecta con Madrid en 90 minutos y 130 minutos, respectivamente. A Murcia y Elche todavía no ha llegado el AVE (Fomento asegura que estará como muy tarde a principios de 2018) y de Almería poco se sabe, aunque ayer se apuntó como posible el año 2023.

De la conexión ferroviaria de Cercanías entre Alicante y Murcia (3 millones de pasajeros al año) todo son promesas incumplidas. La línea no está electrificada, no hay conexión con el aeropuerto de Alicante-Elche (quinta terminal de España que da servicio también a Murcia tras el fiasco del aeropuerto de Corvera) y ahora mismo hay dudas de que la línea acabe modernizándose solapada por la ejecución de la línea de Alta Velocidad. De Valencia hacia Cataluña la ejecución de la obra está un poco más avanzada y, de hecho, las pruebas entre Valencia y Castellón empezaron el mes pasado.

La línea de cercanías Alicante-Murcia tiene actualmente una longitud de 78 kilómetros en vía única en ancho ibérico y vía doble en la variante de El Reguerón para largo recorrido, regionales, cercanías y mercancías con una velocidad máxima de 140 km/hora. A partir de ahí, Almería ni tiene cercanías, ni alta velocidad.

El Ministerio de Fomento no prevé, sin embargo, que el Corredor Mediterráneo esté complemente operativo hasta 2025 en un eje que, sumando a Cataluña y Andalucía al completo aporta el 50% de la población española, el 45% del PIB, el 47% del tejido productivo, el 46% del empleo, el 51% de la exportaciones y que unido ocupa el séptimo puesto de Europa en generación de PIB.

Comunidad Valencia, Murcia y Almería comparten también la A-7, la gran autovía del Mediterráneo por la que se canaliza el movimiento de las exportaciones, sobre todo la hortofrutícola, y es que el camión garantiza que las mercancías lleguen en 24 horas a los mercados europeos sin romper la cadena de frío.

Ayer en Almería, como se ha hecho hasta la fecha en el resto de encuentros empresariales, se presentó el Canal de Comunicación www.elcorredormediterraneo.com y se emitieron imágenes específicas que afectaban a Almería.

Entre los empresarios participaron Vicente Boluda (Naviera Boluda), Ignacio Osborne, José García Carrión, José Cano García. José Mª Bonmatí, Juan Roig (Mercadona), Antonio Arias (Vectalia), Federico Félix, Artur Carulla, Ignacio Ferrero, Javier Godó Muntañola (Grupo Godó), Francisco Martínez-Consentino, Javier Moll (presidente de Prensa Ibérica), José Terradellas, Federico Michavila, Quico Catalán, Tomás Fuertes y, entre otros, los alicantinos Rafael Luvián, Alfonso Jurado, José Manuel Sirvent, Juan José Costón, Joaquín Selma y Miguel Ángel Paredes. También asistieron representantes de las Cámaras de Comercio y organizacione empresariales como José Manuel González de Lara, Antonio Ponce Fernández, José María Albarracín, Pedro García Balibrea, Francisco Gómez Andreu, presidente de Coepa; Salvador Navarro (CEV), Josep Antoni Belmonte y Juan Bautista Riera Fernández, presidente de la Cámara de Comercio de Alicante.

El naviero y presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios, Vicente Boluda, anunció que en junio se verá si la «voluntad política, que sí existe para la ejecución del Corredor Mediterráneo, se traduce en hechos», y advirtió de que hasta que no exista compromiso «de los que mandan para que tenga doble plataforma para pasajeros y mercancías no tendremos esta infraestructura».

Boluda subrayó que pese a que las fechas que se han dado desde el Ministerio de Fomento «son tardías», la reunión con su titular, Íñigo de la Serna, en febrero «confirmó que sí hay voluntad política». «Por sus explicaciones vimos que empezaba a haber planificación y que hay un equipo trabajando, lo cual ya es un avance».

No obstante, instó a «tener claro» que la medida de habilitar un tercer carril es «necesaria pero provisional» y que, por tanto, hasta que no exista doble plataforma «no tendremos Corredor Mediterráneo», aseveró. «¿Es posible que todos los que estamos defendiendo la ejecución de esta infraestructura estemos equivocados? Yo creo que no», exclamó Boluda.

El presidente de Ave insistió en el papel del movimiento empresarial para concienciar a la clase política de lo vital de «completar la actual España radial con esa España circular» en la que es clave el eje mediterráneo, para «ordenar las piezas del proyecto, que es como un tetris o un galimatías, para unir en la reivindicación a toda la sociedad».

El naviero valenciano sentenció que el Corredor Mediterráneo «es un proyecto sobre el que hay mucha información pero no rigurosa, en muchos casos no real y siempre muy politizada. Es muy importante que todos los territorios defendamos todos y cada uno de los kilómetros del trazado completo, que redunda en competitividad y beneficio para España».

Boluda se mostró convencido de que los actos organizados «no están cayendo en saco roto porque a nivel social estamos cogiendo mucha fuerza y el empuje para conseguirlo, pese a que las cantidades consignadas en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) no sean las adecuadas».

Por su parte, el presidente de Coepa, Francisco Gómez, se mostró encantado «con la gran respuesta que ha dado el mundo empresarial a este encuentro. Nos jugamos mucho para ser competitivos en Europa. Un tren rápido para sacar las mercancías, que no pase como en Almería desde donde parten al día mil camiones».

Juan Riera, presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, tiene claro que «el tercer carril no es de recibo. Necesitamos la doble vía en todo el corredor y en octubre lo exigiremos en Madrid».