Las monjas clarisas de clausura innovan este año en la venta de recuerdos y productos relacionados con la Reliquia y la romería con la puesta a la venta en su tienda, que han ampliado, de reliquias de la Santa Faz en botellín. Se trata de pequeñas botellas de cristal con aceite de oliva que llevan en su interior un pedacito de madera de pino santo y astillas de las vigas antiguas del convento. «Son vigas de hace 500 años. La gente, al saber que es algo de la casa, se la llevan», explica Sor María Clara, una de las monjas de clausura. Ellas mismas han rellenado las botellitas, según dijo, unas 300 unidades que venden a un precio de 3,50 euros, y harán más si se desborda la demanda en la semana de la Peregrina.

«Los frasquitos son un gesto de cariño hacia los alicantinos, preparados para permitirles llevarse a su casa un trocito de la nuestra. Cada frasquito bendecido contiene un fragmento original de las vigas que se han reparado recientemente. En conmemoración del 500 aniversario de la fundación de nuestro monasterio», señala la religiosa.

Se trata de uno de los artículos de la tienda de recuerdos que es una de las fuentes de ingresos para la comunidad de religiosas. Este año también ofrecen, a un euro, cintas bendecidas en el monasterio de la Verónica, es decir, en Santa Faz, a un euro.

Este año hay otra novedad importante que afecta a la romería. Coincidiendo con el centenario de la aparición de la Virgen de Fátima a unos niños, una réplica exacta de esta Virgen participará en los actos del próximo jueves. Se trata, según explica el deán de San Nicolás, de una Virgen Peregrina que saldrá en romería acompañada de fieles el jueves una hora antes de la Peregrina, a la finalización de una misa que empezará a las 7 horas en San Nicolás, para evitar que el habitual colapso se desborde todavía más. Llegará al santuario para recibir a la Reliquia.