El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, ha colgado en su página de Facebook un comunicado en el que asume que se ha equivocado en el momento a la hora de despedir a la cuñada del popular Luis Barcala. Además, admite que la denuncia interpuesta por el PP hacia su persona ha acelerado la destitución.

El primer edil ha reconocido que la interposición por parte del portavoz del PP, Luis Barcala, de una denuncia frente a él por "prevaricación administrativa" con los contratos de Comercio ha precipitado el cese de Catalina Rodríguez. Echávarri afirma que su error radica en el "momento de materializar la decisión", pero matiza que ésta "hacía tiempo estaba tomada y que por unas cuestiones u otras no acababa de ejecutarse". Asimismo, Echávarri se ha referido al cese de Catalina Rodríguez como el de "personal interino del Ayuntamiento de Alicante, que ocupa puestos en fraude de ley y que accedió al mismo sin superar un proceso selectivo (que no de selección) público y abierto donde primara la igualdad, el mérito y la capacidad".

Por otra parte, el escrito manifiesta que la destitución de Rodríguez no será previsiblemente la última y recuerda que existe una decena de personas en la misma situación (sic) "de hijos, primos, cuñados, vecinos o íntimos amigos de políticos del PP". Además, esta petición de cese de estas personas es unánime por parte de los sindicatos; o al menos lo era", concluye.