El secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, destacó ayer que la Comunidad Valenciana avanza posiciones en el ranking turístico entre los principales destinos nacionales. En estos momentos, la Costa Blanca se ha consolidado como tercer destino nacional tras Andalucía y Cataluña, con Benidorm como primer destino de los españoles que salen de vacaciones buscando el sol y la playa.

La reflexión de Colomer llegaba tras comprobar que el sector turístico ha vivido la mejor Semana Santa de la historia con lleno total y una ocupación hotelera media de diez puntos por encima de la de 2016. El hecho de que el puente haya caído a mediados de abril, que apenas hubiera estaciones de esquí operativas y el tiempo veraniego han influido en la recuperación del mercado nacional. «Está claro que los españoles han perdido el miedo a viajar condicionados por la crisis económica. Se nota más alegría y la gente que puede gasta más y no se reserva como en los años duros. Si todo sigue así vamos a tener un gran verano y un gran año porque la Costa Blanca es, además, un destino competitivo en calidad y precio y seguro», destacó ayer el hotelero José María Caballé, presidente de la cadena benidormí Servigroup, con diez mi plazas entre Alcocebre y Mojácar, en la costa de Almería.

En Benidorm muchos hoteles llenaron en los días fuertes del puente y en el resto del franja litoral funcionó la reserva de última hora gracias al buen tiempo.

Francesc Colomer subraya que «vamos por el buen camino y empezando a recoger los frutos de lo sembrado, un modelo turístico transversal que aporta valor al destino convirtiéndolo en atractivo todos los meses del año».

Por otro lado, el secretario autonómico apuntó, no obstante, que «no debemos confiarnos en las estadísticas puesto que el turismo es una carrera de fondo y obtener buenos datos en cada etapa es todo un logro». La Comunidad Valenciana registró 28,2 millones de pernoctaciones hoteleras en 2016 y 18,5 millones de pernoctaciones extrahoteleras.