La multinacional sueca Ikea mantiene el interés por instalarse en la provincia de Alicante, pero ya no descarta hacerlo fuera de la ciudad de Alicante, según han confirmado a este diario fuentes de toda solvencia, que aseguran que la firma internacional está abierta en estos momentos a otras opciones distintas de la capital de la provincia. La empresa sueca mantiene el proyecto de 2009, que planteaba 131.000 metros cuadrados de superficie comercial repartida entre una tienda Ikea y un centro comercial con hipermercado y medianas superficies, según se expuso en su momento. El modelo, según se explicó a este diario, responde a los estudios de mercado realizados que les permite adoptar una decisión concienzuda que mantienen a lo largo del tiempo por entender que es la mejor de las posibles.
Ikea quiere contar con una segunda tienda en la Comunidad Valenciana, en concreto en la provincia, y por ello se abre ahora a otras localizaciones que antes se habían descartado por completo. Las fuentes consultadas no se pronuncian sobre si la multinacional sueca está ya barajando opciones, aunque en los últimos meses, ante la posibilidad de que la inversión no acabara realizándose en Alicante, se ha apuntado desde distintos sectores empresariales de la provincia la posibilidad de que acabara instalándose en IFA, en Elche.
De darse esta circunstancia sería un jarro de agua fría para la ciudad de Alicante, aunque el hecho de que Ikea mantenga la tienda y el centro comercial es incompatible con el planteamiento del pequeño comercio y del Ayuntamiento que sostiene «Ikea sí, macrocentro no». La administración local alicantina, con Miguel Valor (PP) como alcalde, presentó alegaciones en contra de un proyecto que fuera más allá de una tienda Ikea. Por su parte, una de las primeras medidas que adoptó el tripartito -PSOE, Guanyar y Compromís- cuando llegó al gobierno local fue solicitar al Consell que anulara la Actuación Territorial Estratégica presentada por Alicante Avanza, del promotor Enrique Ortiz.
El único proyecto urbanístico presentado hasta ahora para la construcción del centro comercial en la zona de Rabasa, en Alicante, junto a la avenida de la Universidad y la autovía, es el presentado por Alicante Avanza que contempla 184.920 metros cuadrados de superficie comercial (54.000 metros cuadrados más que los contemplados en el proyecto de Ikea de 2009), de los que 35.000 metros cuadrados serían propiamente para la multinacional. La empresa de Enrique Ortiz ha desistido de la actuación alegando que es inviable por las infraestructuras que sería necesario acometer para evitar colapsar la autovía, que fueron cuantificadas en 27 millones de euros.
Descartada la Actuación Territorial Estratégica por parte del Ayuntamiento de Alicante y del Consell por ser contrarias ambas administraciones a un centro comercial que no sea exclusivamente la tienda Ikea, el tripartito ha adoptado medidas en los últimos meses encaminadas a facilitar la instalación de Ikea en Rabasa, una vez los tribunales se han pronunciado anulando el plan urbanístico que permitía el desarrollo de la zona para la gran área comercial.
El concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, ha sostenido sobre la implantación de la firma sueca que la administración local alicantina está a la espera de que Ikea les haga saber qué quiere.
