La Fundación Internacional para la Protección de los Animales Raúl Mérida, que gestiona en Tángel el Arca de Noé, centro de recuperación de especies exóticas y salvajes, quiere abordar el futuro de las instalaciones con el alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, después de que un juzgado haya suspendido su cierre de forma cautelar. Se trata de un auto de la sala de lo Contencioso-Administrativo 1 de Alicante que estima las alegaciones que la fundación presentó contra la denegación de la prórroga del contrato por tres años que acordó el tripartito el 13 de diciembre. Ayer, el alcalde insistió en su defensa de la labor que hace el centro y recordó que está en contra del cierre de las instalaciones, pero afirmó que el Ayuntamiento recurrirá el auto «en defensa de sus propios actos».

El responsable del Arca de Noé destaca que el juez acuerda la paralización cautelar «en base a la labor que realiza el centro, a que posee todas las autorizaciones para ello y a que no hay fundamentos para decretar su cierre. Además dice que éste es negativo para el bienestar animal, lo que supone un respaldo muy importante a la labor realizada», señala Mérida.

El Arca de Noé, que está ya en proceso de desmantelamiento, sigue recibiendo peticiones de acogida, las últimas de dos circos, para un grupo de camellos y llamas. Las tienen sobre la mesa pero no las pueden atender. «Vamos a pedir una reunión con el alcalde para afrontar el futuro del centro y llegar a acuerdos que garanticen el bienestar animal y permitan seguir protegiendo ejemplares».

«Como no sabíamos qué ocurriría (con el recurso) trabajamos con la idea de que nos íbamos. Hemos trasladado cosas y desmantelado parte de la estructura porque al ser animales salvajes hay que planificarlo todo». Actualmente en el Arca de Noé quedan unos 30 tigres, lobos, serpientes, loros y puercoespines, entre otros, del centenar largo de animales que había.

El centro ha recibido varias inspecciones del Ayuntamiento desde diciembre, la última el pasado viernes a cargo de la edil de Protección Animal, Marisol Moreno, junto a un arquitecto para ver qué uso darle a las instalaciones situadas en la finca municipal El Roal. También les ha remitido numerosas peticiones de informes sobre el progreso del desmantelamiento. El auto con fecha 22 de marzo da 15 días al Ayuntamiento para apelar en el juzgado.

«No voy a decir nada sobre El Arca de Noé porque mi postura en contra de su cierre es de sobra conocida», dijo ayer el alcalde, Gabriel Echávarri. Desde Alcaldía recordaron que nunca estuvo a favor de no prorrogar el contrato al centro, el cual visitó, a la vez que defendió la labor de Mérida. «Pero el resto de miembros del equipo de gobierno tenían otra opinión al respecto, y cuando se gobierna en coalición a veces te ves obligado a adoptar decisiones con las que no estás de acuerdo».

Natxo Bellido, portavoz del tripartito, y de Compromís, grupo que apoyó la propuesta de Guanyar de cerrar el Arca frente al alcalde, dijo que aún no conocía el auto y que no lo habían valorado en la Junta de Gobierno de ayer. Por su parte, los dos grupos de la oposición, PP y Ciudadanos, coincidieron en reclamar al alcalde que retire las delegaciones a la edil Marisol Moreno. Cs, además, presentará una moción al pleno de mañana para que se readscriban a Sanidad las competencias de Protección Animal, como ya plantearon en sus enmiendas a los presupuestos.