El Gabinete de Violencia Doméstica (Gavid) de la Policía Local de Alicante, que trata también el acoso en los colegios, ha visto y actuado ante muchas situaciones de violencia escolar durante años y cuando ya era tarde. Por eso, ahora, y dentro de la campaña «Stop al acoso escolar» ofrecen herramientas a los niños para que el germen del acoso, la violencia escolar, no suba del primer escalón.

El inspector del Gavid, Iván Torregrosa, advierte de que el acoso dentro de las aulas «puede verse como una situación normalizada», por eso insiste en la necesidad de un abordaje transversal con todos los implicados.

«La campaña va enfocada al corazón, a la humanidad ya que trata de dotar de habilidades sociales a los chavales», explica el agente Rafael Peral durante el cierre de este programa en el Colegio Gabriel Miró. «Empezamos con un nivel de empatización y aprovechamos el liderazgo, y que nos escuchan, y les enviamos el mensaje de la campaña, que es «Nadie merece ser tratado mal».

Moldear

La campaña se desarrolla en varios colegios y se hacen evaluaciones con los profesores y los padres. «A los padres les digo que cada niño es un príncipe o una princesa que hay que moldear» y por eso advierte de que no hay que darles todo lo que piden. «Tendemos a darles el móvil de última generación, la consola. Y realmente a los niños falta comprarles un 'no'. Deben de trabajar al tolerancia y la frustración».

El Colegio Gabriel Miró desarrolla desde 2008 un trabajo de tolerancia y empatía entre el alumnado que da sus frutos, ya que desde aquel año no han tenido que abrir ningún expediente a los alumnos. «Son impresionantes la colaboración y la creatividad del centro con un programa que viene de muchos años atrás», elogian desde el Gavid.

En su caso y a través de la campaña «Stop al acoso» querían ir más allá, contar con más herramientas para luchar contra la violencia escolar y aprender a detectarla.

Un diploma

La campaña trata de crear una complicidad entre los alumnos y la Policía Local. Y ello queda plasmado en un diploma que los agentes le han dado al centro, que lo ha colgado en su hall de forma visible. «A los chavales les pagamos de alguna forma y les damos un diploma y en el reverso tienen las herramientas que pueden utilizar».

Los escolares de sexto que son ahora los mayores del colegio serán los pequeños del instituto el próximo curso y deben llegar con herramientas. Los agentes les dicen: «recuerda siempre hacer valer tus derechos, pero no olvides cumplir tus obligaciones, recuerda el derecho a ser tratado bien y la obligación de tratar bien a los otros». El programa inculca conductas responsables y el arma a utilizar es la asertividad.

Los niños tienen un derecho básico, ser tratados bien, mejorar, principalmente, su autoestima. El segundo mensaje es que nadie debe ser tratatado mal. «Les decimos: vive el momento en el momento, no guardes el secreto».