Los efectos del temporal han desbordado a las compañías de seguros en Alicante. Durante la mañana de ayer se multiplicaron por cuatro las reclamaciones que reciben habitualmente, en su gran mayoría por partes procedentes de afectados en sus casas o coches de la Playa de San Juan.

El presidente del Colegio de Mediadores de Seguros de Alicante, Eusebio Climent, aconseja que en los casos de inundación se acuda a empresas que resuelvan la situación para ir agilizando, y que se guarde la factura para su posterior abono por el seguro.

Las compañías están ahora pendientes de que la agencia estatal determine la calificación oficial del suceso como de «tempestad ciclónica» (antes denominado catástrofe), que corresponde a una caída de lluvias de más de 40 litros por metro cuadrado.

En el caso de esta gota fría han sido 150 litros por metro cuadrado los acumulados, lo que no deja lugar a dudas sobre el origen de los desperfectos,pero de cualquier forma debe ser el organismo oficial el que lo dictamine.

Filtraciones

Una vez establecida la categoría del suceso, las reclamaciones serán atendidas por el consorcio nacional de seguros. Hasta que llegue ese momento cada compañía lleva a cabo los trámites pertinentes con sus clientes directamente, para pasarlos posteriormente al consorcio llegado el caso.

Ayer se aplicaban en ello Luis Soler, gestor en la oficina de Mapfre en Tómbola; Federico Emilio López Fanes, gerente director de la oficina de Santa Lucía en la Rambla; o Mari Luz Pantoja, agente en la oficina de Pelayo en la avenida Xavier Soler, quienes confesaban estar «desbordados» por la avalancha de reclamaciones. Filtraciones, inundaciones en bungalows y coches anegados en aparcamientos, como el del Hospital de San Juan, configuran la mayoría de los partes.