La nueva línea de Alta Velocidad que conectará Murcia con Monforte del Cid (Alicante) tendrá que soportar el tráfico del AVE, los trenes de cercanías y los de mercancías, lo que dificultará la circulación en una de las zonas de la Región y de la provincia de Alicante más pobladas, en la que se alcanzan los tres millones de viajeros anuales. Además, la Alta Velocidad «machacará varios tramos» de la vía actual, que serán sustituidos por un trazado que no reúne las condiciones necesarias para los mercancías, al modificarse, por ejemplo, la pendiente de la vía, según explicó ayer el presidente de Ferrmed, Joan Amorós.

La única solución para facilitar el tráfico de mercancías en el Corredor Mediterráneo -que enlazará Algeciras con la frontera francesa- a su paso por la Región es la construcción de una vía exclusiva para los trenes de carga, que discurra «desde Monforte hasta el sur de la Región», salvando las cercanías de las grandes ciudades que se encuentran a lo largo de este itinerario.

El representante del grupo de presión que trata de sacar adelante la ejecución del Corredor recordó que el transporte de mercancías por ferrocarril apenas llega en España al 3%, mientras que en otros países europeos supone ya el 18% del movimiento total.

A su juicio, será imposible llegar a alcanzar este porcentaje en España si el corredor ferroviario por el que deben circular las mercancías va poniendo trabas a los trenes de carga, en lugar de facilitar las conexiones ferroviarias. Joan Amorós señaló que, mientras que se construye el tercer carril, habrá que sortear las dificultades como se pueda, colocando incluso «dos locomotoras al tren, si es necesario». Sin embargo, dejó claro que habrá que buscar alternativas a medio y largo plazo para competir con el camión.