Un estudio liderado por científicos del Área de Investigación en Servicios de Salud de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (Fisabio), dependiente de la Conselleria de Sanidad, en colaboración con investigadores de diferentes centros nacionales, han analizado el efecto del cambio del sistema de copago sobre los medicamentos implantado en julio de 2012 respecto a la adherencia (o cumplimiento) al tratamiento farmacológico en pacientes con síndrome coronario agudo.

Los resultados, publicados en la prestigiosa revista científica Heart, confirman que «en pacientes de alto riesgo y para medicación esencial, se debería valorar la retirada del copago, ya que supone una barrera a la adherencia, pudiendo incrementar el riesgo de los pacientes de sufrir eventos graves y costosos para el sistema sanitario», resalta Gabriel Sanfélix-Gimeno, jefe del Área de Investigación en Servicios de Salud de Fisabio-Salud Pública.

Pese a que la Conselleria de Sanidad retiró el copago de las medicinas para los jubilados que cobran menos de 18.000 euros al años, éste se mantiene para quienes perciben pensiones por encima de este límite. Los trabajadores en activo también pagan por sus medicinas, un 40% quienes ganan por debajo de 18.000 euros y un 50% quienes perciben hasta 99.999 euros.

Los científicos han estudiado el impacto del copago en cuatro grupos de medicamentos (antiagregantes, betabloqueantes, IECAs/ARAIIs y estatinas). Los resultados indican que el cambio de copago tuvo un efecto negativo inmediato sobre la adherencia de los pensionistas en dos de los cuatros grupos de medicamentos, los de mayor coste (estatinas e IECA/ARAII). Comparados con el grupo de control, la adherencia a estos medicamentos disminuyó un 6.8% y un 8.3%, respectivamente. La adherencia a estatinas también empeoró en el grupo de activos de renta de más de 18.000 euros, reduciéndose un 7.8% respecto al grupo control. El cambio de copago no tuvo efectos significativos sobre la adherencia a medicamentos de menor precio y nivel de copago, como los antiagregantes y betabloqueantes.

Desde la Conselleria de Sanidad insistieron ayer en el esfuerzo que se ha hecho para eliminar el copago en «las personas más vulnerables» y en la «limitación de recursos» que existe en la actualidad. Sanidad exige al Gobierno central que derogue el copago.