La entrada en el Mediterráneo de una bolsa de aire cálido y de componente de poniente va a provocar que a medida que avance la semana el tiempo se acerque más al clásico del verano que al final de invierno que marca el calendario. Las temperaturas van a seguir subiendo hasta el fin de semana para llegar a su cota máxima el sábado, jornada en la que la Agencia Estatal de Meteorología prevé que en la franja litoral de la provincia se alcancen los 29 grados. Esta semana, en muchos puntos de la franja costera la temperatura mínima no baja de los 17 grados.

Una situación, sin embargo, pasajera, ya que porque el domingo la máxima caerá a los 20 grados, casi nueve de diferencia respecto al día anterior al entrar viento frío del norte. Y todo después de haber despedido el febrero más cálido de los últimos diez años. Al viento de poniente se sumará mañana jueves una bolsa de aire tropical que, en palabras de Jorge Olcina, director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante, va a provocar un tiempo «estival nada normal que se prolongará hasta el sábado cuando llegaremos al cénit de esta situación anómala. Anticiclón que desparecerá el domingo cuando cambia el viento y entrará del norte, con lo cual se producirá un descenso de hasta ocho grados respecto a las máximas de viernes y sábado».

Por lo que respecta al pasado febrero, los días más cálidos se registraron en la primera semana, concretamente el día 4, cuando la temperatura media estimada en la Comunidad superó los 13º -el promedio normal en el periodo 1981-2010 fue, en este mismo día, de poco más de 8º-. Novelda y València también registraron medias altas, con 13.5º, 1.7º más de lo habitual y 14º , 1.6ºC-, respectivamente. Alicante y Castellón, con 13.8º y 13.1º experimentaron un aumento de 1.5º.

Los observatorios de más precipitación acumulada en febrero fueron Fredes, con 40.8 l/m2, y Morella, con 32 l/m2; mientras que los mínimos se observaron en Orihuela, 2.2 l/m2; Torrevieja, 2.4 l/m2 y Crevillent, 3.5 l/m2, registros que suponen un descenso del 90% sobre la precipitación normal. En la ciudad de Alicante se recogieron 7 litros por m2, un 68% menos de lluvia.