La concejala tránsfuga Nerea Belmonte ha presentado una treintena de enmiendas al presupuesto municipal del Ayuntamiento de Alicante para 2017, que de ser aceptadas, al menos las de carácter social, llevarían a la edil a abstenerse en la votación, lo que supondría que el tripartito podría sacar adelante las cuentas. Belmonte pide que se le acepten las propuestas de índole social, vivienda y empleo.

En una de las enmiendas, Belmonte afirma que la Concejalía de Acción Social sufre un grave problema de falta de personal. "Como consecuencia, los funcionarios que trabajan en ella están sobrecargados de trabajo y sometidos a niveles de tensión muy altos teniendo en cuenta que se enfrentan cada día a situaciones humanas muy duras. Estos profesionales de la administración local trabajan con los colectivos más vulnerables de la sociedad y es obligación de los representantes políticos facilitarles la labor lo máximo posible".

En otra de las propuestas, afirma que en Alicante hay cientos de familias que no tienen acceso a una vivienda. "El parque de viviendas del Patronato de Vivienda no es suficiente para poder hacer frente a la demanda de vivienda social en la ciudad. Por lo tanto, es necesario poner en marcha ayudas encaminadas a que las personas más vulnerables puedan acceder a una vivienda con un alquiler social", dice.

En materia de Protección Animal propone, por otra parte, uditar externamente la gestión de la Protectora "así como de cualquier proyecto de protección animal que sea dependiente del Ayuntamiento de Alicante para conocer cuál es su situación real. El control se realizará al menos sobre estado de salud de los animales y si se realizan los controles veterinarios pertinentes, control de los registros de entrada y salida, condiciones en las que viven los animales", dice.