La rotunda oposición del Puerto no cambió ayer, ni un ápice, el discurso del alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, quien se mantuvo firme en su idea de defender su proyecto para ampliar la Explanada, desviando el tráfico por el puerto a través de un túnel bajo el mar y peatonalizando la avenida Conde de Vallellano. El regidor siguió apostando por su controvertido plan pese a las reticencias hechas públicas el pasado miércoles por la Autoridad Portuaria -una institución clave para la iniciativa ya que el grueso de las obras se realizaría sobre su terreno-, que considera «inviable a corto y medio plazo» el plan que cuenta con el aval del jefe del Consell, Ximo Puig, quien se comprometió a cofinanciarlo. «Cuando hay un proyecto de esta envergadura, al principio siempre genera perplejidad. El mismo presidente de la Generalitat, Ximo Puig, dijo que no había que patrimonializar, que estamos para repartir. La gente no sabe si Conde de Vallellano es de unos u otros, sino que está en Alicante», señaló ayer el regidor en el receso del pleno y tras un minuto de silencio celebrado a las puertas del Ayuntamiento de Alicante por las últimas víctimas de la violencia de género.

Echávarri anunció que la próxima semana se reunirá con el presidente de la Autoridad Portuaria, Juan Antonio Gisbert, nombrado por el gobierno socialista del Consell. «He quedado la semana que viene con Gisbert. Ayer [por el miércoles] le envié una carta para decirle que le quería explicar el proyecto», explicó el regidor socialista, quien subrayó que el proyecto no se quedará en un cajón por las trabas administrativas que ahora argumenta la Autoridad Portuaria, como la invasión de terrenos fiscales. «No sé si el proyecto saldrá, es posible que tenga muchos obstáculos, pero seguro que no será por una oposición del Puerto de Alicante. No sé si al final habrá trabas técnicas, económicas, pero no administrativas [en referencia a la invasión del recinto fiscal, entre otras cuestiones]», continuó el alcalde, quien añadió que sería «inaudito» que el Ministerio de Fomento, en manos del PP, alegara que «esto es mío y por aquí no pasa nadie».

El regidor socialista recordó que el Ayuntamiento y el Puerto han «empezado a colaborar» en los últimos meses, en alusión por ejemplo a que la Policía Local de Alicante ya pueda actuar en suelo del Puerto para acabar con la venta ambulante. «Estamos aprendiendo a compartir. Seguro que el Puerto está de nuestro lado si hay que desbloquear el proyecto con Fomento», se aventuró ayer a predecir el regidor sin haber hablado todavía con la máxima autoridad del Puerto, con el que sólo se ha cruzado mensajes por escrito. Y es que, a juicio de Echávarri, «nadie entendería que una cuestión administrativa fuera un obstáculo, ya que no hay ningún elemento fijo que impida el proyecto».

La Autoridad Portuaria, en su comunicado público del miércoles, subrayó que el proyecto inicial de Echávarri, diseñado por el ingeniero Andrés Rico, «invadiría el recinto fiscal» y, por tanto, «impediría el uso de todo el recinto portuario como zona habilitada para el control aduanero, lo que resulta absolutamente imprescindible para el tráfico de mercancías en un puerto, al impedir su tránsito libre en el interior».

En su defensa del plan de ampliación de la Explanada, el regidor socialista recordó el histórico desvío del cauce del río Túria en la ciudad de València. «Cuando se quiso hacer, al igual que la Ciudad de las Artes y las Ciencias, se tildaba de locos a quienes lo proponían», puntualizó Echávarri, quien concluyó: «Vamos a seguir trabajando, sumando consenso y alianzas a favor del proyecto».