Saber la conveniencia de que sus hijos pudieran visitarle en prisión. Esta fue una de las primeras cuestiones que Miguel López, encarcelado desde el pasado día 10 por la muerte de su suegra, la viuda del expresidente de la CAM Vicente Sala, planteó en la prisión de Fontcalent, según ha podido saber este diario.

Fue el lunes 13, después de pasar su primer fin de semana entre rejas y de que recibiera la visita de su mujer, la menor de los cuatro hijos de la víctima, que se acercó hasta el recinto penitenciario ese primer domingo de su marido encarcelado.

El principal sospechoso del asesinato de la matriarca de la familia Sala quiso conocer los pros y los contras de recibir en prisión la visita de sus hijos, en concreto de los dos menores, que residen en Alicante. El mayor se encuentra estudiando fuera de España.

Al yerno de María del Carmen Martínez le hicieron ver que la prisión no es un lugar muy aconsejable para los menores por mucho que, como precisó, ambos, sobre todo la pequeña, son muy maduros para la edad que tienen.

Miguel López continúa proclamando su inocencia entre rejas y quienes le han visto aseguran que está tranquilo y lejos de derrumbarse, una actitud en la que tiene vital importancia el apoyo que está recibiendo por parte de su mujer y de sus cuñadas.

Las tres mujeres se personaron inicialmente en la causa como perjudicadas con el abogado que pasó a ocuparse de la defensa de Miguel López tras ser detenido, el murciano José Antonio García, quien por este motivo tuvo que dejar la representación de las mujeres.

Las dos cuñadas requirieron entonces los servicios de otro letrado, en esta ocasión de Madrid, que ha planteado el archivo de las actuaciones para Miguel López, en cuya inocencia creen, y la continuación de las actuaciones para descubrir al asesino de su madre. La otra hermana y mujer del sospechoso no se encuentra personada en estos momentos mientras que el primogénito de la familia, Vicente Sala Martínez, lo hizo en diciembre en calidad de acusación particular.

Una vez se le dé traslado, lo que todavía no ha ocurrido, todas las partes tienen que pronunciarse sobre el recurso de apelación que el martes presentó el abogado de Miguel López solicitando su libertad. El letrado argumenta que no hay ni indicios contra su clientes, que si no se han fugado en los meses que han trascurrido desde que se cometió el crimen hasta su detención no lo va a hacer ahora y que no entiende qué pruebas puede ocultar después de tanto tiempo. Y plantea como alternativa el arresto domiciliario o el alejamiento si teme el juez que pueda influir en el testimo