Unas normas institucionales, consensuadas y demostrativas para el correcto uso de la lengua catalana. Así definieron ayer la nueva Gramática de la Lengua Catalana los máximos responsables del Instituto de Estudios Catalanes (IEC) en su presentación en la Universidad de Alicante (UA).

Se trata de un volumen que consta de 1.312 páginas que viene a actualizar la realizada por Pompeu Fabra hace 100 años. Entre sus virtudes, tanto el presidente del IEC, Joandomènec Ros, como la presidenta de la Sección Filológica del IEC, María Teresa Cabré, destacaron que, además de adaptarse a la nueva realidad sociolingüística, esta gramática recoge la variedad dialectal del territorio en el que se habla catalán. «Es un modelo más amplio y flexible con el que todos los hablantes se pueden identificar», destacó Cabré. En ella han trabajado una treintena de expertos durante 20 años.