La compañía Hidraqua, dentro de su política de orientación al cliente, ha lanzado un nuevo servicio que permite al usuario de 60 municipios alicantinos pagar cada mes una cantidad fija que se determina en función de su consumo del año anterior y pasados doce meses se regulariza según su gasto real. Una tarifa plana que permite a los clientes decidir el importe a pagar en los recibos.

De este modo, las familias pueden planificar mejor sus gastos y distribuir sus pagos habituales de manera uniforme. Además, a pesar de que la regularización se realice de forma anual, el cliente seguirá recibiendo cada tres meses la factura para poder controlar su consumo real. Para dar de alta el servicio «12 gotas», el usuario puede dirigirse a cualquiera de los canales de la compañía: internet, teléfono u oficina sin ningún coste adicional.

Únicamente debe tener un contrato con más de un año de antigüedad y domiciliar sus recibos. Además, el cliente puede decidir el día del mes que quiere recibir el cobro en el banco.

«Dentro de estas políticas de orientación al cliente cabe destacar, además, las numerosas ayudas que ofrecemos para que aquellos colectivos más vulnerables puedan hacer frente al recibo del agua. Así, los fondos sociales, las tarifas especiales y los fraccionamientos en el pago de la factura para facilitar el abono de la misma, nos han permitido ayudar a más de 21.300 familias en la Comunidad Valenciana en el último año», según apuntó ayer Francisco Bartual, director general de Hidraqua.

El servicio de atención de personas con discapacidad auditiva, el lanzamiento de la APP de la oficina virtual o el servicio de cita previa son algunas de las iniciativas más recientes que ponen de manifiesto este compromiso con los clientes.

Hidraqua es empresa del sector del medioambiente que gestiona todos los procesos relacionados con el ciclo integral del agua: la captación, la potabilización, el transporte y la distribución para el consumo ciudadano con absolutas garantías sanitarias. También se ocupa del saneamiento, la depuración, la devolución del agua tratada al medio natural y la reutilización del gas y del fango que se generan durante el tratamiento.