Miguel López le traslada a su interlocutor su convencimiento de que el móvil del crimen hay que buscarlo en la actividad del grupo empresarial de la familia fuera de Españafuera de España, de la que se encarga su cuñado Vicente.

Conversación

13/12/2016-20.45horas.

· Miguel acaba de contarle al tal Carlos que han matado a su suegra «porque si se lo cepillan a él no cobran», en alusión a su cuñado, de quien dice que siempre «nos está ocultando...ocultando siempre a sus hermanas. Le decía, ¿qué pasa en Latinoamérica?, ¿qué pasa en Latinoamérica?

Carlos: Es que es para acojonarse, macho

Miguel: Esto es la hostia. Y el aviso ha sido para él. Como diciendo, machote.

C: Espabila y deja de tocarme las pelotas.

M: ¿Vas a pagar o no vas a pagar? O lo que sea... O ¿te vas a apartar de este negocio, o qué? Que no lo sé Carlos, pero sé que viene por ahí seguro. Estoy contigo cien por cien.

C: Si, si. Yo lo tengo claro. Es que éste no es el estilo de aquí de este país.

M: Qué va, qué va, qué va...esto viene de cualquier lio suyo y ahora está, claro, mareando la perdiz con lo que puede para disimular, que es la hostia. (...) Es que es de película, macho, de película

M: Ya,ya. De película o de lo que quieras... pero encima en Novocar, ¿vale? Yo no quería, yo no quiero mal para nadie pero, coño... vamos a ver... si tenía que haber sido... dios mio.

C: En otro sitio.

M: Coño...¿Tiene que ser allí? Parece que me quisieran joder a mi también encima, ¿sabes? (...)

C: Y encima un sitio al que tienes que volver a trabajar

M: No. Y aparte... no... Y el tema que era viernes que estaba yo...que si hubiera sido a lo mejor un lunes, o un martes, un miércoles no estoy. Pero como era viernes que ya no tienes que ir a ningún sitio, pues el viernes por la tarde llegas ... bueno... Paso por allí, hago el último vistazo, acabas, miras los correos electrónicos, miras absolutamente todo y dices bueno, como ya es viernes me quedo en Alicante... y como aparte llevas toda la semana, que tu lo sabes, puteado por media España. (...) Jodidos están los cuatro (por los hijos de la víctima) porque vamos yo, por mucho que tenga enemigos y tal (en alusión al primogénito) él no se imaginaba que pudiera pasar esto.