El Ayuntamiento de Alicante ha aprobado finalmente la licitación del servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales con el voto a favor del PSOE y Compromís y la abstención de Guanyar, que en la anterior ocasión se había opuesto en la Junta de Gobierno. El empresario Enrique Ortiz, ahora embargado por el juzgado tras denuncias presentadas por el Banco Sabadell, lleva veinte meses prestando este servicio fuera de contrato.
Así, la Junta de Gobierno, a la que no ha asistido el alcalde por encontrarse en Valencia en una reunión con el conseller de Educación, ha dado el visto bueno a una licitación que el tripartito retiró a finales del pasado año ante las amenazas de huelga de los trabajadores por la falta de cláusulas sociales que asegurasen la protección laboral de la plantilla. En esta ocasión, el equipo de gobierno incluye, entre otras, una cláusula para que la empresa concesionaria garantice el mantenimiento de los puestos de trabajo. En cambio, no ha podido controlar el precio final del servicio tanto como pretendía, ya que buscaba que las empresas no pudieran rebajar el precio un 5% por debajo del precio de licitación. Finalmente, ante la oposición del interventor a la propuesta inicial, el 5% de rebaja será sobre la media de las ofertas presentadas por las empresas.
El servicio sale a licitación por dos años, prorrogables dos años más, y por un precio base de 18,4 millones de euros. El tripartito estima que el nuevo contrato tardará unos tres meses en formalizarse.
