Educación ha cambiado las pruebas para obtener el certificado de Valenciano con el objetivo de incrementar su uso oral y homologarlas a las lenguas europeas.

Los nuevos certificados que emitirá el organismo de la Generalitat se dividen por tanto en tres niveles: A, de inicio en el uso social de la lengua; B, que posibilite comunicar lo que se quiere según el contexto y enfrentarse a problemas de la vida diaria; y C, para tener ya un amplio repertorio lingüístico y una comunicación fluida y espontánea.

Otro cambio es que las pruebas tendrán más carga oral y que dichos exámenes hablados se harán por parejas de examinandos para que estos interactúen entre ellos y no únicamente con el examinador.

Además, en el C2, los aspirantes deberán hacer una prueba de mediación lingüística o resolver una situación real en la que una persona que sólo sabe valenciano pueda comunicarse. Entre los modelos piloto de esta prueba de mediación están el explicar a una persona la guía de un museo que no está escrita en valenciano, sino en castellano

Homologación

Cada uno de estos niveles, a su vez, tiene su correspondiente homologación europea con dos etapas de certificación: A1, A2, B1, B2, C1 y C2. El A1 no existía como certificación hasta ahora; el A2 se correspondía al de Conocimiento Oral; el B1 era el Grado Elemental; el B2 no existía; el C1 es como el Grado Medio; y el C2 se corresponde con el Grado Superior.

La nueva escala de seis niveles totalmente independientes, pues no hace falta aprobar el inferior para optar a uno superior, arranca en el A1 o Básico, inexistente hasta ahora.

Para obtenerlo no hará falta presentarse a ningún examen, ya que bastará acreditar una serie de horas de formación en cursos de Escuelas de Adultos municipales o de universidades. El nivel de Coneixements Orals pasará a ser Básico avanzado o A2, mientras que el Elemental se llamará B1 o nivel de usuario Independiente. Se incorpora el nivel Independiente avanzado o B2. El Mitjà pasa a ser C1 o Experimentado y el Superior C2 o Experimentado avanzado.

La aplicación del nuevo tipo de pruebas y certificados va a ser progresivo. En junio de este año se convocarán las nuevas pruebas del A2 y B1 y se mantendrán las del Oral, Elemental, Mitjày Superior, mientras que en junio de 2018 ya se implantan los seis niveles y se eliminarán las nomenclaturas anteriores, como señaló ayer el conseller, Vicent Marzà.

El nivel A1, según concretó finalmente el director general, se obtendrá con la asistencia a un proceso formativo previo que se realizará en universidades, centros de formación de adultos y ayuntamientos.

Novedades

Asimismo, la JQCV volverá a homologar de forma automática con los títulos de valenciano que expide los emitidos por la Junta Permanent de Català de la Generalitat de Catalunya y la Junta Avaluadora de Català del Govern balear, como se hacía antes de que en 1995 el Consell del PP dejará de reconocer la validez de los títulos de ambas autonomías en la Comunitat. Desde 2006, una sentencia del Tribunal Supremo obliga a la JQCV a reconocer los títulos de catalán de Cataluña y Balears en las oposiciones a la Administración valenciana, pero tiene que ser el opositor quien solicite dicha validación.

Otra novedad es que los profesores de Valenciano de la concertada podrán ser examinadores de la JQCV y no sólo los de la pública como hasta ahora. Todos los examinadores sin excepción, tanto los de la JQCV como los de la Comisión Interuniversitaria de Estandarización de Acreditaciones de Conocimientos de Valenciano (Cieacova), que incluye las cinco universidades públicas y las privadas Cardenal Herrera-CEU y la Católica de Valencia, deberán realizar cursos específicos de formación que organizará la Junta de manera presencial, semipresencial o por internet.