La Junta del Gobierno del Ayuntamiento de Alicante ha autorizado a sus representantes en el consejo de administración de Avant (25% del capital es del Consistorio) a que apoyen que la empresa vuelva a endeudarse por valor de casi 1,3 millones de euros que debe a los bancos en concepto de los intereses del pago del crédito de 90 millones que suscribió el 21 de julio de 2010 para pagar la entrada del AVE en Alicante, y del que todavía debe 60 millones que vencen el próximo mes de mayo.

Dada la complicada situación financiera de la sociedad y la negativa del Consell a poner más capital -la Generalitat considera la labor de Avant ya ha culminado y debe ser el Ministerio de Fomento quien asuma sus competencias-, es necesario volver a endeudarse para pagar unos intereses cuyo abono venció entre agosto y noviembre de 2016. Ahora, Adif, uno de los socios (37,5%), pedirá el crédito y aportará el capital a la espera de que Avant reciba los fondos Feder. Este nuevo préstamo vencerá el 30 de junio.

La situación de Avant es todavía de solvencia porque tiene más activo que pasivo y la mayor parte de sus socios (Ayuntamiento y Consell cuentan con el 50% del capital) estiman que lo mejor sería disolverla, pero oficialmente no se ha tomado ninguna decisión.