La atracción de ver la nieve nieve colapsó ayer la autovía A-7 entre Alicante y Alcoy. Miles de vecinos de muchas poblaciones de la provincia se desplazaron al norte para ver y disfrutar del manto blanco que todavía cubre las cotas más altas en l'Alcoià, El Comtat y la Foia de Castalla. Esta masiva salida provocó colas kilométricas a media mañana y hasta primera hora de la tarde, por lo que se generaron problemas, principalmente, en el tramo entre Ibi y la salida a la Carrasqueta y el tráfico fue lento en otros puntos de esta carretera nacional.

A pesar de que en el norte de la provincia este domingo amaneció con lluvia y con viento, fueron muchos los que programaron visitar la nieve en su día de descanso. Así, durante la mañana muchos vehículos circularon en dirección a Alcoy por la A-7 hasta que sobre las 12 horas, y ante la coincidencia de mucho tráfico, se generaron colas kilométricas en esta autovía que llegaron hasta la rotonda de la Universidad de Alicante, según informaron fuentes de la Guardia Civil de Tráfico y viajeros.

Estas retenciones se fueron diluyendo en el área de l'Alacantí, pero en el tramo entre la salida de Ibi este y el desvío hacia Xixona y la Carrasqueta, todavía registraba retenciones sobre las 14.30 horas, según pudo comprobar este diario, e incluso durante las primeras horas de la tarde. Una imagen que se asemejaba a una operación salida o entrada después de un periodo vacacional, pero lo cierto es que esta circulación masiva era en busca de la nieve.

En el contexto de este denso tráfico, ayer por la tarde se produjo una colisión frontal en la CV-800, a la altura de la Mina en Xixona, que se saldó con una herida grave, según fuentes de la Policía Local y de los bomberos.

Aparte de las incidencias, las huellas que ha dejado el temporal fueron el atractivo para muchos alicantinos que aprovecharon la jornada dominical para pisar el manto blanco que todavía cubre parajes naturales como la Font Roja, Mariola o los campos aledaños a la autovía, en el término municipal de Ibi.

Familias y grupos de amigos estuvieron en estos enclaves, y en otros, para realizar muñecos de nieve, tirarse bolas o captar este momento a través de la lente de las cámaras digitales o de los móviles. Los visitantes, bien abrigados, también estuvieron deslizándose con trineos por las gélidas cuestas de las sierras.

El tiempo registró una leve mejoría en las comarcas del norte al remitir las fuertes rachas de viento aunque la lluvia no cesó. A pesar de estas adversas condiciones, que en los cascos urbanos como Alcoy o Ibi provocaron caídas de árboles y muros y de las recomendaciones de los expertos de Climatología de no ir a buscar la nieve, la asistencia fue masiva en l'Alcoià y El Comtat.