El portavoz municipal del PP, Luis Barcala, ha calificado de "desgobierno lamentable" los continuos reproches entre el alcalde, Gabriel Echávarri, y sus socios del tripartito, "repartiéndose órdagos y acusaciones, mientras los alicantinos contemplan atónitos el desinterés que los concejales del gobierno local muestran por realizar su trabajo con la seriedad y el rigor que exigen sus actuales responsabilidades”.

El edil ha manifestado a través de un comunicado que "mientras escuchamos el ruido de sus broncas los presupuestos municipales para este año ni han llegado a Madrid, de Ikea no se sabe nada de nada, las empresas de Enrique Ortiz siguen engordando sus cuentas ya que el tripartito prefiere pagarle todos los meses más de 700.000 euros fuera de contrato antes que sacar la prestación de esos servicios públicos a concurso, de proyecto de ciudad ya ni hablamos y, en este suma y sigue, el alcalde sin encomendarse a sus socios de gobierno ni a nadie quiere subirle el sueldo a sus asesores nombrándoles directores generales".

"Por el camino, Echávarri aún tiene tiempo para generar un incendio en la comunidad escolar creando un conflicto donde no lo había por su imposición de un horario para los conserjes de los colegios, y casi mejor no hablar de la libertad comercial, porque cada día dice una cosa diferente, o del fallido cambio de rótulos de las calles que ha sido noticia nacional por hacerlo mal", ha añadido el portavoz de los populares. Barcala lamenta que "los alicantinos se despiertan todas las mañanas para desayunarse las broncas entre los socios del tripartito, faltándose incluso al respeto, y en la mayor parte de las ocasiones se enzarzan en asuntos que no le interesan a nadie ni resuelven ningún problema, cuando no los provocan".