La exgimnasta rítmica alicantina Estela Giménez Cid, bicampeona del mundo y oro en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, manifestó ayer en una red social su disgusto y el de sus familiares al encontrarse con las placas de la calle que lleva su nombre ya colocadas sin tener noticia de cuándo se haría. La suya es una de las 46 calles, plazas y parques cuya denominación se está cambiando en aplicación de la ley de Memoria Histórica, iniciativa que promueve una concejalía que dirige Compromís.
«Foto hecha por mis familiares de la placa que lleva mi nombre. Así me he enterado. Toda la alegría que nos daba el poder recibir este homenaje de nuestra ciudad se truncó en un sentimiento agridulce». Éste es parte del «tuit» que la gimnasta escribió al conocer que su nombre figura ya en la calle del Pla, próxima al Montemar, que hasta ahora se llamaba Camarada Romeu Palazuelos, por un falangista fusilado en la Guerra Civil.
El alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, al conocer la queja de la gimnasta, contactó con ella para pedirle disculpas. «Vive en Madrid por trabajo y le ha dicho que estará encantado de recibirla. Que cualquier persona que merece una calle en homenaje tiene el respeto del alcalde, aunque no sea su competencia, que ha sido un error, que se han hecho las cosas mal porque era algo muy bonito y que el error de los compañeros (en alusión a la Concejalía responsable) ha sido por inexperiencia», dijeron desde Alcaldía. El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, aclaró que no se está haciendo inauguración por cada placa, y que sólo se celebró el de Las 27 Constituyentes por ser la primera y de Miquel Grau por su simbolismo.
