Cuando parecía que el culebrón político sobre el futuro del Arca de Noé iba a conocer su último capítulo en la Junta de Gobierno extraordinaria convocada ayer para votar la denegación de la prórroga del contrato, el tripartito logró avivar una polémica que ahora se traslada a mañana domingo, jornada en la que colectivos animalistas han organizado una concentración a las puertas del albergue de animales de Bacarot para protestar contra la gestión de Raúl Mérida, responsable de ambas instalaciones. La siguiente fecha marcada en rojo en el calendario será el próximo martes, cuando se prevé llevar de nuevo la propuesta a la Junta de Gobierno, aunque entonces será ya con las cartas de los socios de gobierno sobre la mesa, tras desvelar ayer Compromís el signo de su voto tras varios días de silencio. Los de Bellido y Guanyar votarán, si no cambia nada hasta ese día, a favor del cierre del Arca.

Y es que, cuando todos esperaban conocer el desenlace sobre el futuro del centro de recuperación de animales, la historia sigue por ahora abierta y con una nueva trama tras invitar el alcalde, Gabriel Echávarri, a la concejala de Protección Animal, Marisol Moreno (Guanyar), a que valore su dimisión si finalmente se rescata el contrato del Arca de Noé argumentando «graves» irregularidades en la gestión del centro. El dirigente socialista sostiene que, si se acaba cerrando la instalación por deficiencias que «rozan casi el delito» denunciadas por la edil durante los últimos días para defender su postura, Moreno tendría que plantearse su renuncia al ser la «única responsable». «La situación es paradójica. Si hay irregularidades tan graves, ¿por qué espera a que finalice la prórroga del contrato? Había que interrumpirlo de inmediato, la concejala tendría que explicar por qué las ha permitido durante año y medio. A lo mejor es que las irregularidades no son tan graves y lo que subyace es quitar una gestión para poner otra», aseguró ayer el alcalde en los micrófonos de Radio Alicante.

A la espera de la concentración del domingo y de la Junta de Gobierno anunciada para el martes, el sainete de ayer arrancó con puntualidad suiza, y es que el reloj fue protagonista en el seno de un equipo de gobierno que exhibió de nuevo sus notables diferencias. A las 8.30 horas, los cuatro representantes del PSOE y los cuatro de Guanyar estaban presentes en la sala de la Junta de Gobierno Local, en la que no se supo nada de Compromís hasta minutos después, entre cinco o siete en función de la parte. Bellido y Espuch, los dos ediles de la formación nacionalista con voto, llegaron con retraso a la cita, un hecho que aprovechó el socialista Echávarri -conocedor de antemano de que Compromís apoyaría a Guanyar en la pretensión de tumbar la continuidad del Arca de Noé- para someter a votación el único punto del orden del día. Según el regidor socialista, la denegación de la prórroga no salió adelante, por lo que -a su juicio- «el contrato quedaba prorrogado tres años más». Sus dos socios de gobierno insisten, en cambio, en que el punto de volverá a votar el martes. Echávarri también lanzó el órdago de llevar el asunto a pleno, una propuesta que cayó en saco roto. La realidad es que los ediles de Compromís y del PSOE cruzaron ayer sus caminos: cuando unos llegaban, los otros daban por terminada la Junta de Gobierno.

La historia relatada por Echávarri se vio de manera muy distinta desde el otro bando del tripartito, en el que ayer se aliaron Guanyar y Compromís. De hecho, ambos grupos municipales ofrecieron una rueda de prensa conjunta, en la que el PSOE solo estuvo presente a través de dos asesores ubicados entre los asistentes. Allí, Pavón y Bellido coincidieron al criticar la estrategia fallida de Echávarri -calificada como «atajo» por el propio portavoz de Compromís- para propiciar la votación a nivel interno en la Junta sin la presencia del equipo de gobierno al completo. Ambos reprocharon al alcalde sus formas, se negaron a llevar el asunto a pleno -como había propuesto minutos antes Echávarri- y aseguraron que, según la Secretaría del Pleno, el polémico punto se había retirado del orden del día. Ni en este extremo coincidieron los socios del equipo de gobierno, ya que fuentes de Alcaldía defendieron que cuando un asunto no se aprueba en la Junta de Gobierno se retira del orden del día.

Tras las versiones de los protagonistas de un nuevo lío político en el que está ahora en juego el futuro de un centro de recuperación de animales, PSOE, Guanyar y Compromís volverán presumiblemente a verse las caras el próximo martes para decidir definitivamente el cierre del Arca de Noé. Ahora ya se conocen las posturas: Guanyar y Compromís van en esto de la mano.