El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, ha anunciado que ampliará dos días más el plazo inicialmente dado a Ciudadanos para conocer si apoyarán (con el voto a favor o con la abstención) los presupuestos municipales parael próximo año que el propio regidor socialista entregó ayer miércoles en mano a la portavoz del grupo municipal de Ciudadanos, Yaneth Giraldo. En la breve reunión también estuvieron presentes la concejala de Hacienda, Sofía Morales, y el "número dos" de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Antonio Manresa.

A través de un comunicado, el alcalde insiste que "seguirá intentando conseguir el apoyo de Ciudadanos para la aprobación de los presupuestos" pese a las críticas vertidas por Giraldo por la premura de tiempo. Según la nota, el regidor socialista había "ofrecido inicialmente a Ciudadanos reunirse el próximo martes para conocer sus aportaciones", sin embargo, según el citado comunicado, "ante las dificultades mostradas por los cinco concejales y sus asesores para estudiar las 43 páginas de presupuestos, está dispuesto a ampliar el plazo hasta el jueves".

Echávarri recuerda que su intención es remitir a Madrid las cuentas municipales antes de final de año. "Para conseguirlo, el interventor debe disponer de las cuentas públicas el jueves 15 de diciembre", concreta la nota, en la que el alcalde solicita a Ciudadanos un "esfuerzo" en el estudio de las cuentas, "consciente de la necesidad de aprobar los presupuestos para no paralizar las inversiones", a la vez que se ofrece a "personalmente", junto a la edil de Hacienda, Sofía Morales, y técnicos municipales, a "aclarar las dudas que puedan plantear". Según el comunicado, Echávarri "asume que ocho días son más que suficientes para analizar unos presupuestos que no pueden ser modificados en su mayor parte".

El tripartito, que está en minoría en el pleno municipal tras la expulsión de Nerea Belmonte de Guanyar, necesita el apoyo (con el voto a favor o con la abstención) de alguno de los dos partidos de la oposición, PP o Ciudadanos, ante la negativa de negociar con los dos ediles tránsfugas, Nerea Belmonte (ex de Guanyar) y Fernando Sepulcre (ex de Ciudadanos). El alcalde se ha negado también en las últimas semanas a buscar el apoyo del PP, formación a la que acusa de haberle traicionado tras alcanzar acuerdos puntuales, como en la polémica por la libertad comercial.