El Ayuntamiento de Alicante seguirá pagando cada mes 746.000 euros a Enrique Ortiz fuera de contrato por el servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales, que caducó hace un año y medio sin que se haya adjudicado de nuevo. Aunque el equipo de gobierno inició en octubre (con el acuerdo de PSOE y Compromís y la posición contraria de Guanyar) un proceso de licitación para contratar de nuevo el servicio por 9,2 millones de euros al año, los socios del tripartito han decidido anular el procedimiento. La decisión se produjo ayer, por la vía de urgencia y en el último día para que las empresas aspirantes presentaran sus ofertas. Llega tras las tensas negociaciones con los trabajadores de la concesionaria, que la semana pasada llegaron a poner sobre la mesa una amenza de huelga.

Los empleados de la empresa de Ortiz que actualmente presta el servicio, alrededor de unos 400, entendían que el pliego de condiciones para la nueva concesión ponía en riesgo sus puestos de trabajo. Finalmente, el tripartito acordó ayer en la Junta de Gobierno Local desistir del procedimiento de contratación y redactar un nuevo pliego de condiciones, con especial atención a las «cláusulas sociales».

El alcalde, Gabriel Echávarri, daba por rotas las negociaciones con el comité de empresa la pasada semana y, en este caso, sus socios de Compromís, forzaron la reanudación de las negociaciones con la plantilla, en las que también participó el jefe de gabinete del alcalde, Lalo Díez. El portavoz del tripartito y de Compromís, Natxo Bellido, aludió a los altibajos de los procesos de negociación y aseguró que la decisión tomada ayer se produjo «tras el diálogo con los trabajadores» al entender que «que había un espacio de mejora para la protección social» de los empleados en el pliego de condiciones, que se rehará.

Admitió que anular el procedimiento de licitación alargará la contratación del servicio, por lo que las arcas municipales tendrán que seguir pagando a Ortiz fuera de contrato del orden de 746.000 euros al mes por la limpieza de colegios y dependencias municipales. Desde que el contrato caducara en junio de 2015 se han pagado ya fuera de contrato alrededor de 13 millones de euros.

Bellido, también edil de Contratación, aseguró que en el momento de acordar la anulación del procedimiento de contratación en la Junta de Gobierno Local no se había presentado ninguna oferta, pero no concretó si a lo largo de la jornada de ayer alguna empresa lo había hecho. Con todo, subrayó que «no hay derechos consolidados de ninguna mercantil» y descartó que la decisión pueda tener alguna consecuencia.

Desde Guanyar apoyaron la decisión de Compromís y PSOE de anular el procedimiento de contratación, esperando que «se mejore el pliego de condiciones» y se asuman algunas de las propuestas que realizaron al mismo. El portavoz de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, destacó que, de ser así, su grupo se abstendría en lugar de posicionarse en contra de la licitación, como ocurrió en octubre. Y es que los de Guanyar mantienen que no votarán a favor de un proceso de licitación porque defienden que el servicio se municipalice. Algo que, según Pavón, «no se ha querido hacer por parte de nuestros socios de gobierno».

Precisamente esa falta de acuerdo interno, entre licitar o rescatar el servicio, fue lo que demoró la nueva licitación del contrato. Finalmente, PSOE y Compromís se alinearon para sacar adelante la nueva contratación pese a la posición en contra de Guanyar. Lo sacaron a licitación el 4 de octubre, con un coste de 200.000 euros más al año de lo que ahora se paga a Ortiz fuera de contrato y sin permitir rebajas de más del 5% en el precio (18,4 millones para los dos años de contrato).

Bellido sostiene que es una decisión «política» que calificó de «medida valiente». Sin embargo, desde el PP, la edil Mari Carmen de España criticó la «incapacidad de gestión del tripartito» para contratar un servicio que lleva un año y medio caducado.

Por otro lado, la Junta de Gobierno acordó crear una comisión técnica para realizar un seguimiento del contrato de mantenimiento del cementerio.