Las inclemencias del tiempo no lograron frustrar una jornada lúdica con amigos o en familia por las calles del centro de Alicante. Más de 2.500 personas participaron en la mañana de ayer en la 14 edición de la Volta a Peu por la ciudad, un evento que no se celebraba desde 2009 y que regresó con un récord de asistencia, imponiéndose a las no muy buenas condiciones meteorológicas con las que amaneció Alicante este domingo. La lluvia que cayó de manera intermitente durante toda la mañana, pero de forma muy débil, no supuso impedimento alguno para la celebración de una prueba más festiva que deportiva, aunque sin perder de vista el ejercicio físico, que se caracterizó en todo momento por un ambiente muy bueno entre todos los asistentes, buena parte de ellos grupos de amigos o familiares y muchos también acompañados de sus mascotas.

La Fundación Caja Mediterráneo y el Ayuntamiento organizaron este regreso de la Volta a Peu, que contó además con el patrocinio de INFORMACIÓN y de Coca-Cola, entre otros. La prueba arrancó desde el inicio de la Avenida Doctor Gadea para volver casi al mismo lugar, el parque de Canalejas, después de cinco kilómetros de recorrido por vías céntricas como las avenidas de la Estación y de Alfonso el Sabio y parte del casco antiguo. A su llegada a la meta, los participantes eran recibidos por una batucada, y después el ambiente era amenizado por otra formación musical similar. Al fondo, el escenario desde el que después se ofrecerían diversos regalos servía de «photocall» para todos los que iban llegando y que quisieran guardar algún recuerdo de su participación en esta cita.

En apenas una hora ya habían llegado a la meta todos los participantes, y poco después ya se procedió a repartir obsequios a los asistentes. En primer lugar, a quienes habían acudido con su mascota, que no eran pocos: en el evento pudieron verse perros de toda raza y tamaño, que parecieron contagiarse de ese buen ambiente reinante. Después se sortearon entre los 2.500 dorsales diversos útiles para la práctica deportiva, como mochilas, botellas para llevar consigo las bebidas y complementos de equipación. Un grupo de asistentes, conformado por miembros de tres familias, tuvo la suerte de recibir cuatro premios. Una de las mujeres destacaba el valor de esta iniciativa: «Te permite hacer deporte sin cansarte y en compañía de los niños, al tiempo que ves tu ciudad».

Esa misma buena sensación transmitían otras tres mujeres de diferentes edades que habían acudido juntas, con el niño de apenas 3 años de la más joven -«que se lo ha pasado muy bien y no se ha sentado en el carro en todo el camino», apostillaba la madre- y un perro. «Para repetir el año que viene», afirmaban.

La cita tiene muchos visos de recobrar su continuidad, tal y como destacaba el vicepresidente de la Fundación CAM, Miguel Valor, aunque quizá en otra época del año en la que sea menos probable que el mal tiempo pueda deslucir la jornada. El también exalcalde de Alicante mostró su satisfacción por «la respuesta de los ciudadanos» en un evento que permite «recorrer Alicante sin coches ni humo». También estuvieron presentes el presidente de la Fundación CAM, Luis Boyer, junto con el presidente de Cáritas de la diócesis de Orihuela-Alicante, y la concejal de Deportes, Eva Montesinos.