El Ayuntamiento de Alicante presentó ayer a los vecinos, festeros y comerciantes de San Blas el proyecto de reforma de la calle Pintor Gisbert, una de las vías principales del barrio. La iniciativa urbanística permitirá que las aceras de la calle se amplíen -pasando en algunos puntos del actual metro a más de dos metros de anchura-, una alternativa que busca promover el comercio tradicional. «Es una medida que demandan los comerciantes porque permite paseos cómodos y la posibilidad de pararse ante un escaparate sin obstaculizar el tránsito peatonal», aseguran desde la Concejalía de Comercio tras una reunión en la que estuvo presente el concejal de Urbanismo y vicealcalde, Miguel Ángel Pavón, el asesor de Comercio, Pedro de Gea, junto a representantes de las hogueras, los Moros y Cristianos, de los comerciantes y los vecinos.
El borrador del proyecto presentado ayer, que contó con el visto bueno de las partes, pasará ahora a la fase de redacción definitiva y posterior licitación. Cumplido esos trámites, los actores implicados se volverán a reunir, según aseguran desde el Ayuntamiento, para consensuar las fechas para las realización de las obras.
Entre las curiosidades, las aceras contarán en ambos lados con dibujos en acero inoxidable de la cruz y la media luna, en un guiño a los Moros y Cristianos del barrio.
Además, el plan de urbanización prevé mantener las plazas de aparcamiento existentes, otra de las reclamaciones de vecinos y comerciantes, a la vez que se pretende que la calzada tenga un ancho suficiente para conjugar el tráfico diario con la realización de los desfiles de los Moros y Cristianos y el montaje del racó de la hoguera de San Blas. El arbolado, por su parte, se podrá retirar para que durante los días de fiesta se pueda disfrutar del ancho habitual y también del que ocuparán diariamente las plazas de aparcamiento. Entre las novedades, desaparecerá la valla de la acera de Pintor Gisbert, en el tramo situado junto a la plaza del general Marcha y frente a la sede del socialista, así como el bordillo que delimita el carril bici, que en un «futuro próximo» pasará a estar pintado en el área central de la calzada.
