El tripartito se reafirmó ayer en su posición de permitir la libertad de horarios comerciales en Alicante siempre que las grandes superficies respeten los compromisos de conciliación laboral marcados por el alcalde, que pasan por la contratación de empleados y que éstos trabajen un máximo de 11 domingos y festivos al año. Así lo reiteró ayer el portavoz del gobierno local, Natxo Bellido. «La posición está marcada para que las reglas del juego sean iguales en todas las zonas. Ellos saben las condiciones», apuntó tras conocer que los centros comerciales Gran Vía, Plaza Mar 2 y Puerta de Alicante se muestran dispuestos a negociar y abandonar la vía judicial, donde por ahora ganan al Ayuntamiento, y por la que reclamarán a las arcas municipales una indemnización por responsabilidad patrimonial si no consiguen la apertura los domingos.
«Estamos abiertos a seguir hablando pero ya hemos dicho lo que vamos a hacer. Siempre es mejor llegar a un acuerdo entre nosotros que estar en los tribunales pero nuestra posición la saben». De ahí que el Ayuntamiento esté preparando un recurso ante el juzgado.
Bellido se reunió ayer con Ignasi Candela, diputado de Compromís el Congreso, donde presentarán de nuevo una Proposición No de Ley que planteará la necesidad de derogar la ley nacional que impone la implantación de Zonas de Gran Afluencia Turística (ZGAT), con libertad total de horarios comerciales, en grandes ciudades como Alicante.
Esta propuesta persigue dejar sin efecto una normativa que, según Compromís, condiciona el modelo comercial de la ciudad y atenta contra la autonomía local en comercio, área sobre la que la Generalitat Valenciana tiene delegada la competencia. La derogación de las ZGAT permitiría a la Generalitat y al Ayuntamiento de Alicante regular y eliminar por completo las áreas de libre apertura en domingos y festivos, y definir, en función de los intereses de la ciudad y el equilibrio entre las demandas de las grandes superficies comerciales y el comercio de proximidad, el modelo comercial de Alicante.
